Cada vez más personas prestan atención al bienestar y a la salud. Sanar el cuerpo y la mente se ha vuelto una cuestión priorita, sobre todo después de dos años de pandemia. De aquí que los balnearios, spas y espacios termales se hayan convertido en una de las opciones más demandas para una mens sana in corpore sano.

Dentro de las infinitas posibilidades existentes, una de las más espectaculares es Caldea, considerado uno de los spa más grande del sur de Europa. Más de 44.000 metros cuadrados, dedicados al bienestar en todos los sentidos, le hacen merecedor de este título que ostenta desde su inauguración en 1994.

Situado en la ciudad de Escaldes-Engordany (Andorra) lo primero que llama la atención es su edificio, de arquitectura singular, levantado sobre un ambiente urbano, pero a la vez rodeado de las espectaculares montañas del país. Su torre, de 80 metros de altura, simula un campanario para proyectar referencias espirituales y místicas que pudiesen ser aplicadas al elemento acuático.

Una vez dentro, es como entrar al interior de un barco con diferentes zonas para el baño y para tratamientos corporales y faciales. Las aguas termales de Caldea son especiales por sus propiedades, ricas en sulfuros y minerales, así como sódicas y aceitosas como plancton termal. Su uso natural produce en el cuerpo efectos antialérgicos, sanadores y descongestionantes.

Caldea se divide en cuatro espacios:

Termolúdico: es el spa más enfocado a las familias o grupos de amigos. La entrada es a partir de los cinco años. Se trata de un spa perfecto para descubrir el termalismo con los diferentes tipos de baños como hammams, sauna, baños indoro-manos... o la laguna panorámica, que ofrece unas vistas impresionantes sobre el río Valira.

Orígenes: está situado justo encima del Termolúdico, se trata de un spa más

reducido, pero que ofrece experiencias más íntimas. Aquí te podrás dar un capricho como un masaje o un tratamiento después de haber disfrutado de un baño de pomelos o de un baño azteca. 

Inúu: es el spa only adults. Se trata de un espacio más tranquilo, donde todo está encarado a una atención más personalizada. Relaja tus sentidos estirado encima de una cama de burbujas o déjate llevar por las diferentes sensaciones que te transmitirán las duchas cromáticas. Para redondear la experiencia, te recomendamos que pruebes uno de los masajes o tratamientos ayurvédicos a la carta.

Likids: es el spa dedicado a los más pequeños de casa, se puede acceder desde los tres años hasta los ocho. Un spa para que los niños se inicien en el mundo del wellness a través de jacuzzis, saunas, así como tratamientos y actividades relacionadas con el mindfulness, todo adaptado a su edad.

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