El céntrico barrio parisino del Marais ha sido el elegido para situar una de las ocho pop-up stores que la marca tendrá en ciudades como Londres, Seúl o Hong Kong, que buscan recuperan el espíritu original del perfume concebido por Gabrielle Chanel, de manera vanguardista, como un tarro de laboratorio.
Los 17 productos de esta colección incluyen cremas de cuerpo, gel, aceite corporal, jabón, gel con brillo y el mismo perfume, todo con la fórmula original del Nº5, creado en 1921 junto al perfumista Ernest Beaux, que hasta la Revolución de los Bolcheviques había trabajado en la corte de los zares.
La particularidad de esta colección -de venta también en otros puntos de venta de España, Estados Unidos y otros países- es que reproduce ese mismo aspecto industrial y recupera la forma de objetos funcionales del día a día. El gel de ducha va en un tarro de lavavajillas, que puede ser reutilizado para ello, la crema corporal en un tarro de pintura al óleo, el aceite en uno que imita el de aceite de motor, y las sales de baño van en una caja de té.
"Queríamos volver al proceso de creación del primer envase Nº5. En aquel momento se trataba de un simple frasco de laboratorio, un objeto funcional que se convirtió en lujoso e icónico. Ya existía está noción de transformar un objeto común en uno precioso", señaló en una nota Thomas du Pré de Saint Maur, responsable creativo de belleza.
Mientras que la decoración de las tiendas es ultracolorida, e inspirada en edificios industriales de los años 1960, los tarros son minimalistas, con el característico blanco y negro de la firma. Para Du Pré de Saint Maur es la "experiencia lujosa" del producto lo que hará de estos objetos cotidianos su singularidad.
Una portavoz de la firma indicó en la tienda que en lugar de hacer una celebración de homenaje al pasado, esta forma de festejar el nacimiento del perfume pone la vista en el futuro.
Una creación vanguardista
Chanel fue la primera en ampliar su marca con productos de belleza, y diseñadores como Jeanne Lanvin o Jean Patou siguieron más adelante sus pasos.
El perfume, que sólo ha sido modificado ocho veces desde su concepción, se convirtió en un objeto de deseo y tuvo un éxito fulgurante, especialmente en Estados Unidos, convirtiéndola en millonaria. Un perfume que sigue siendo, en la actualidad, el más vendido de toda la historia.
[Más información: El Nº5 de Chanel, cien años de historia en un frasco de cristal]