Aunque muchas veces lo olvidemos, el estilo de vida que llevamos está relacionado con el estado de nuestra salud. La piel también nota los estragos de unos malos hábitos, como ingerir demasiadas cantidades de alcohol, fumar, no hacer deporte, no beber suficiente agua, o exponernos demasiado tiempo al sol sin protección. La piel envejece más rápido si no corregimos estas –malas- costumbres.
Bebe menos alcohol
Desmaquíllate todas las noches
Le harás flaco favor a tu piel si duermes con el maquillaje de todo el día. Los poros absorben los residuos, pudiendo producir irritación y generar puntos negros o espinillas. Aunque debes tener cuidado, porque frotar la piel con demasiada fuerza o agresividad puede ser dañino. Lo ideal es que utilices una esponja facial durante la limpieza y que no te olvides de eliminar totalmente el maquillaje del rostro. Existen muchas casas de cosmética que ofrecen packs de tres productos: gel limpiador, tónico y crema. Si tienes la cara grasa, fíjate si la crema es especial para tu tipo de piel.
Come sano
La alimentación es la base de la salubridad del cuerpo, por lo tanto, una dieta equilibrada mantendrá tu piel sana. Las frutas y verduras sirven como antioxidantes para evitar el daño provocado en las células por la acumulación de radicales libres. También favorecen la cicatrización y combaten las infecciones de piel.
Toma agua
La cantidad diaria recomendada de agua es al menos litro y medio. Aumentar la ingesta de líquido mantendrá tu piel hidratada y verás el atraso de las arrugas sobre ella. Los zumos naturales, el té o la leche también resultan beneficiosos.
No expongas tu piel bajo los riesgos del sol
La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que uno de los factores que más ponen en riesgo padecer cáncer de piel es la exposición indiscriminada al sol. Usa protectores solares con pantalla física y química. Recuerda que debes aplicártela al menos veinte minutos antes de la exposición solar. Lo ideal es aplicarla de nuevo cada cuatro o cinco horas. Este vídeo explica muy bien qué es lo que hace la radiación ultravioleta a la piel.