Los protagonistas de la exitosa serie de la década de los noventa, Friends, que enamoró, que acompañó y que, sobre todo, generó miles y miles de carcajadas por parte de los espectadores, vuelven al foco mediático por un triste acontecimiento. Matthew Perry, que interpretó al carismático Chandler Bing, fallecía este pasado 28 de octubre a los 54 años en su jacuzzi. La causa de la muerte sigue siendo un misterio a falta del informe completo de la autopsia.
El resto del elenco, compañeros de profesión -y de vida- emitían un comunicado en el que lamentaban profundamente la pérdida de su amigo: "Estamos absolutamente devastados. Éramos más que simples compañeros de reparto. Somos una familia", señalaban.
Mientras Jennifer Aniston (54 años) -Rachel Green-, Courteney Cox (59) -Mónica Geller, la mujer de Chandler-, Matt LeBlanc (56) -Joey Tribbiani-, David Schwimmer (56) -Ross Geller, su cuñado- y Lisa Kudrow (60) -Phoebe Buffay-, lloran la muerte del genio de la comedia -que ha influido a tantísimas vidas mientras él mismo luchaba contra sus propios demonios-, sus fans rememoran los mejores momentos que la sitcom dejó y vuelven al presente cuestiones de la época.
Matt LeBlanc, Lisa Kudrow, Courteney Cox, David Schwimmer, Jennifer Aniston y Matthew Perry.
Ahora, la antigua mansión en la que vivió la también protagonista de Sígueme el rollo junto a Adam Sandler (57) durante el rodaje de Friends está a la venta. Se trata de la finca construida en 1936 y apodada The Crown Jewel (La Joya de la Corona) por las impresionantes vistas panorámicas que ofrece este complejo.
Se encuentra en la cima del conocido vecindario de Laurel Canyon, Los Ángeles, y en ella han vivido numerosos rostros conocidos y figuras de Hollywood, incluidos escritores, directores, actores y novelistas además de Aniston como Corbin Bernsen (69) o Amanda Pays (64), entre otros.
Ya restaurada, la vivienda 2114 Kew Drive consta de casi 600 metros cuadrados distribuidos en cuatro estructuras distintas: la residencia principal de dos dormitorios y 2 baños, una casa con piscina, una casa de huéspedes en forma de A -en la que estuvo Jennifer- y un bungalow llamado "El Nido de Nestor", que rinde homenaje a su antiguo inquilino, el director de fotografía y ganador de un Óscar, Néstor Almendros.
La mansión tiene un diseño particular y único que en su momento enamoró a la californiana. Además de su espectacular paisaje, su espacio al aire libre y su piscina, lo que le llamó la atención a la actriz fue los encantos que ofrece el interior de la residencia.
La casa principal.
Por un lado, el atractivo de la casa principal se basa en los ventanales de suelo a techo con las que a través de ella se ve Los Ángeles al completo. Diseñada en tonos neutros, blancos y con muebles que se sumergen en la estética, es perfecta para admirar la ciudad de California y disfrutar de la tranquilidad que ofrece la zona. Esta cuenta con dos habitaciones, una gran cocina, dos baños, suelos de madera y un patio comedor al aire libre.
Por otro lado, se encuentra la casa de huéspedes construida tanto los suelos como las paredes de madera junto con una chimenea, perfecto si lo que el inquilino busca es un ambiente natural y rústico.
La casa de huéspedes.
La cocina americana está equipada con estufa, horno y fregadero, posee una sala de estar con dos ventanas que dan a la gran propiedad y un baño, encima del cual se encuentra el área tipo loft donde los residentes tienen espacio para dormir y relajarse.
La casa de la piscina está establecida como gimnasio, en la que se detectan mancuernas, pesas y una pelota de yoga, y finalmente la cuarta estructura es el bungalow, en el que se aprecia un sillón, una larga mesa, una alfombra de piel y una estantería con bebidas.
La casa de la piscina y el bungalow.
Esta propiedad se erige como un verdadero tesoro en Laurel Canyon que albergó a algunas de las mentes más imaginativas de la industria del entretenimiento. La última vez que estuvo habitada fue en 2020, cuando fue comprada por 2 millones de dólares, y ahora vuelve al mercado por 2,5 millones de euros.
Es este domingo, 5 de noviembre, cuando la mansión abrirá sus puertas para que cualquier futuro comprador visite sus rincones y se enamore de ellos, al igual que lo hizo Jennifer hace casi 30 años.