El pasado viernes, día 12 de agosto, el mundo de la interpretación y prácticamente todo Hollywood contuvo la respiración al conocer el fatal desenlace de la admirada actriz Anne Heche. A la temprana edad de 53 años, la también directora y productora encontraba la muerte una semana después de haber sufrido un aparatoso accidente de tráfico mientras conducía a gran velocidad por las calles de Los Ángeles, California.
Según los primeros informes policiales, su vehículo, un Mini Cooper de color azul, se estrelló contra una vivienda en la zona de Mar Vista y acabó envuelto en llamas. El automóvil iba a tanta velocidad que se salió de la carretera y ardió al chocar contra el inmueble, provocando graves quemaduras a Heche.
Antes del accidente, varias cámaras de seguridad la grabaron conduciendo de manera temeraria por la mencionada zona residencial. De hecho, se vio implicada en dos accidentes al chocar primero contra un coche y después contra un garaje del que huyó mientras un vecino le gritaba, reprobando su actitud, según se aprecia en un video difundido en internet.
[Muere la actriz Anne Heche a los 53 años tras su grave accidente de tráfico]
El impacto definitivo, el que tuvo contra la citada casa californiana, provocó también que parte de la mansión ardiese. Ha sido ahora, cuatro días más tarde, cuando se han difundido las espeluznantes imágenes de cómo quedó el hogar tras el accidente de Heche. Según se observa en las fotografías, hay varios árboles caídos, muebles destrozados por las quemaduras y parte del jardín cubierto de escombros.
La casa, que todavía hoy sigue precintada por la Policía, está presidida por un enorme cartel de color rojo que reza lo siguiente: "Peligro. No entre ni ocupe esta edificación. Por orden del Departamento de Building & Safety de la ciudad de Los Ángeles. Esta edificación o sitio está severamente dañada y es peligrosa. No entre. El entrar o habitar esta edificación sin permiso es un delito".
La Policía de Los Ángeles (LAPD), que continúa investigando qué podría haber llevado a la actriz a haber perdido el control de su coche, estudia si la protagonista de Seis días, siete noches conducía bajo los efectos de las drogas antes del accidente de tráfico del pasado viernes.
La Oficina de Información Pública de la Policía de Los Ángeles confirmó a los medios de comunicación el pasado jueves, un día antes del inesperado final, que los análisis de sangre revelaron la presencia de drogas, aunque se necesitan "pruebas adicionales para descartar otras sustancias administradas en el hospital".
Durante años, Anne Heche habló de sus problemas de salud mental, que condensó en un libro, Call Me Crazy (Llámame loca), publicado en 2003, después de ingresar en un centro de rehabilitación. En sus memorias contó que su padre abusó de ella antes de fallecer en 1985 por complicaciones del virus VIH. "Me violó, me acarició, me puso en cuatro patas y abusó de mí", afirmó.
También añadió algo igual o incluso más grave: su madre siempre lo supo y decidió guardar silencio. En ese mismo fatídico año 1985, su hermano mayor murió en un accidente de tráfico que ella siempre creyó que se trataba de un suicidio.