Este jueves, 19 de septiembre, saltaban las alarmas en Dinamarca después de conocerse el ingreso urgente de la reina Margarita (84 años) tras sufrir una caída mientras se encontraba en el castillo de Fredensborg, la residencia donde se traslada en primavera y otoño y que se encuentra a escasos 40 km de Copenhague. 

Aunque en ningún momento se especifica el tipo de consecuencias que este percance ha tenido, se conoce que permanece en observación. Cabe recordar que en 2023 fue operada de la espalda, lo que la obligó a cumplir con una larga baja médica. 

Un día después de este ingreso, Federico de Dinamarca (56) habló de cómo se encontraba su madre, a pesar de no haberla ido a visitar. "Se encuentra bien dadas las circunstancias. La familia no tiene más información en este momento", aseguró ante los medios daneses. Ahora se ha conocido una nueva información por la que ha sido muy criticado y que pone en un aprieto a la Corona. 

Este viernes, 20 de septiembre, el monarca ha decidido abandonar Dinamarca para iniciar un viaje privado del que apenas se conocen ningún tipo de detalle y del que Casa Real ha informado después del interés generado en el país. No se conoce ni el destino ni las compañías, pero se sabe que su mujer, la reina Mary (52), se quedará en Copenhague y actuará como regente en ausencia de su marido. 

Aunque el Rey sólo se marcha del país unos días durante el fin de semana, esta decisión ha generado un gran número de críticas en Dinamarca teniendo en cuenta el estado en el que se encuentra su madre, todavía en observación. A pesar de encontrarse a kilómetros de distancia, Federico ha preferido no ir a visitarla al hospital y continuar con sus planes privados. 

"He hablado con ella y parecía estar bien, por lo que pude oír", así hablaba Federico de una conversación que había tenido con su madre vía telefónica. El hecho de no haberse preocupado por Margarita de Dinamarca ha elevado el tono de los medios daneses que, en los últimos meses, están cuestionando su papel como monarca. 

Desde que ascendió al trono, hace ya más de nueve meses, ha sido muy criticado por la falta de actos públicos, las excesivas vacaciones -tanto privadas como públicas- de las que ha disfrutado y la ausencia de esa figura de líder que se necesita en un cargo como el que tiene. 

Otra de las cuestiones de las que más se está hablando es del hermetismo que gira en torno a la familia real danesa. Suelen dar muy pocos detalles sobre lo que ocurre de puertas para dentro. De hecho, ha extrañado que ni siquiera se conozca más del suceso que ha tenido como protagonista a la Reina. 

Esta notada ausencia llega después de un verano donde han sido el centro de la polémica, y no precisamente por su trabajo. Cada vez se toman más días de vacaciones, organizan actos privados en lugar de ser públicos y se mantienen en silencio. Lo que parecía ser el inicio de una nueva etapa en Dinamarca, ha terminado por confirmar que Federico de Dinamarca no estaba del todo preparado para ocupar el puesto de monarca.