Escándalo mayúsculo en torno a los duques de Sussex, el príncipe Harry de Inglaterra (39 años) y su esposa, Meghan Markle (42). Justo cuando acaban de terminar su viaje a Nigeria -visita que les ha granjeado bonísimas críticas-, el matrimonio se enfrenta a una gran controversia que tiene que ver con la fundación Archewell, que ellos mismos crearon.
La Fiscal General de California, donde residen, ha declarado "morosa" la fundación, según Daily Mail. Se añade que la organización del duque y la duquesa de Sussex "no está al día", según el Registro de organizaciones benéficas y de recaudación de fondos de California.
El registro que se realizó a Archewell arrojó que no se presentó adecuadamente su informe anual ni sus tarifas de renovación, y le ha prohibido recaudar fondos o distribuir fondos caritativos por ahora. La Fundación Archewell ha afirmado que la desaparición de un cheque en el correo es la razón por la que un regulador de organizaciones benéficas de EE. UU. la ha declarado "morosa".
Harry y Meghan en una fotografía reciente, tomada en Wellington.
Fuentes de Sussex insisten en que la documentación se presentó a tiempo, y la discrepancia se debe a un "cheque" que acompañaba a los documentos que desaparecieron en el correo. También sostienen que "se ha enviado un nuevo cheque", lo que debería significar que el problema se "resolverá rápidamente", pero la revelación probablemente causará vergüenza.
Una fuente de Archewell ha asegurado: "Para la fundación, todo se presentó a tiempo. Parte de esa presentación fue un cheque físico. Parece que ese cheque nunca se recibió, de lo cual sólo nos enteramos cuando se publicó este aviso de morosidad".
Se añade: "Se envió un nuevo cheque por correo y anticipamos que esto se resolverá rápidamente y se reflejará en los registros dentro de siete días hábiles". Este contratiempo se produce cuando la pareja ha retornado de una visita de tres días de alto perfil a Abuja y Lagos, en Nigeria, que fue denominada gira real en todo menos en el nombre.
Durante el viaje, los Sussex anunciaron una asociación entre la Fundación Archewell y la Fundación Geanco, una organización benéfica en Nigeria que lidera misiones quirúrgicas, promueve la salud materna y ofrece becas a jóvenes víctimas del terrorismo.
Meghan y Harry, en una instantánea de archivo.
Pero el pasado 3 de mayo, el Registro de organizaciones benéficas y recaudadores de fondos envió una carta de "aviso de morosidad" a Archewell diciendo que la fundación está "calificada como morosa" por "no presentar los informes anuales requeridos y/o las tarifas de renovación".
La carta del Registro de organizaciones benéficas y recaudadores de fondos de California advierte: "Una organización catalogada como delincuente no está al día y tiene prohibido participar en conductas para las cuales se requiere registro, incluida la solicitud o el desembolso de fondos caritativos. (...) La organización también podrá ser objeto de sanciones y su inscripción podrá ser suspendida o revocada por el Registro".
"Una vez que envíe los registros de morosidad, se le notificará el monto de los cargos por pagos atrasados que se adeuden". La fundación cree que sus declaraciones de impuestos se presentaron a tiempo y se envió un cheque, y solo se le informó de cualquier problema cuando se publicó el aviso de morosidad.
Regreso de California
Fue el pasado domingo cuando los duques finalizaron su viaje privado de tres días a Nigeria con su visita a Lagos junto a una organización que usa el baloncesto para transformar la vida de jóvenes. Los duques de Sussex llegaron a Lagos, la ciudad más poblada de Nigeria y su capital económica, después de pasar dos días en Abuya.
Los recibió el gobernador del estado de Lagos, Babajide Sanwo-Olu, en su residencia oficial, antes de que se dirigiesen al colegio Ilupeju Grammar, donde conocieron las actividades de la Fundación Gigante de África. "El poder del deporte puede cambiar vidas", aseguró Harry.
Desde su llegada a Nigeria, Harry y Meghan han visitado un colegio en Abuya que recibe fondos de su organización, benéfica, la Fundación Archewell, y han conocido veteranos heridos del Ejército nigeriano, con los que llegaron a jugar un partido de voleibol sentado.
Harry y Meghan, durante su viaje a Nigeria.
Harry animó a los militares a participar en los Juegos Invictus, un evento deportivo para veteranos de guerra y soldados en activo pero heridos, y su última edición se celebró el pasado mes de septiembre en la ciudad alemana de Düsseldorf.
Los soldados luchan contra el grupo yihadista Boko Haram desde 2009 en el noreste de Nigeria, una violencia que se agudizó a partir de 2016 con la aparición de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental -ISWAP, en inglés-.
Además, deben lidiar también con grupos de "bandidos", como se conocen en el país a las bandas armadas que realizan en el país secuestros y robos, sobre todo en los estados del centro y noroeste. Durante un evento la pasada noche en Abuya, Meghan reveló que un análisis de su ADN descubrió que tenía ascendencia nigeriana, y se mostró orgullosa de ello.
Así, dijo que Nigeria era "mi país". "Es un cumplido para mí porque lo que define a una mujer nigeriana es una mujer valiente, resistente, valiente y hermosa", aseguró. Harry y Meghan decidieron renunciar a sus funciones reales en enero de 2020 para iniciar una nueva vida en California (Estados Unidos), donde residen con sus dos hijos: Archie y Lilibet.