El viaje privado de tres días a Nigeria del príncipe Harry (39 años), el hijo menor del rey británico Carlos III (75), y su esposa, Meghan Markle (42), empezó este pasado viernes, 10 de mayo, con bailes durante una visita a un colegio y una reunión en la sede del Ejército en la capital, Abuya.
Según reportaron medios locales, tras llegar a primera hora de este día 10 de mayo, los duques de Sussex acudieron a una escuela, la Lightway Academy, que ha recibido apoyo de su organización benéfica, la Fundación Archewell. Allí, cada uno fue obsequiado con un collar de cuentas tradicional y la pareja presenció un espectáculo de danzas típicas de la etnia igbo, acompañado de percusión.
En un momento dado, Meghan Markle dirigió unas bonitas palabras a los presentes: "Mientras miro alrededor de esta sala, me veo a mí misma en todos vosotros también. Por eso es un completo honor tener nuestra primera visita a Nigeria y estar aquí con todos vosotros".
Hablando sobre salud mental, la duquesa animó a los jóvenes a "ser honestos unos con otros. No hay necesidad de sufrir en silencio. Sólo aseguraos de cuidaros entre vosotros". Harry agregó al punto: "No es ninguna vergüenza poder reconocer que tienes un mal día. (...) Vosotros podéis tenerlo, ella (Meghan) puede tenerlo, yo puedo tenerlo. Podéis tenerlo. Es probable que todos y cada uno de nosotros lo tengamos en un día determinado".
Y añadió el hijo menor de Lady Di: "Si ves que tu amigo de tu clase no sonríe, ¿qué vas a hacer? ¿Le vas a preguntar si está bien? Porque está bien no estar bien". Tras escuchar con atención a su marido, Meghan Markle no pudo resistirse a lanzarle un piropo que el Príncipe encajó con una sonrisa tímida, ligeramente turbado o sonrojado. La duquesa dijo a todos los presentes: "¿Entendéis por qué me casé con él? Es muy inteligente. Y muy inspirador porque dice la verdad".
Tras cambiar el atuendo anterior -una simple camisa beis en el caso de Harry y un vestido largo color salmón en el caso de Meghan- por trajes de chaqueta azul para él y blanco para ella, la pareja llegó al cuartel general de las Fuerzas Armadas nigerianas hacia las 12.45 hora local (11.45 GMT).
Allí, se celebró una reunión con el jefe del Estado Mayor de Defensa, general Christopher Musa, quien los invitó al país después de que Nigeria participara por primera vez el pasado año en los Juegos Invictus.
Este evento deportivo para veteranos de guerra y soldados en activo pero heridos fue creado en 2014 por el príncipe y tuvo su última edición el pasado septiembre en la ciudad alemana de Düsseldorf.
Al confirmar este pasado jueves, día 9, el viaje de los duques en una rueda de prensa, el director de deportes del Ejército nigeriano, vicemariscal del aire Abidemi Marquis, destacó que la visita ayudará a los veteranos a "mejorar su autoestima personal para mejorar su salud mental".
"La participación en Invictus brinda la oportunidad de recuperarse a nuestros soldados", señaló Marquis. Tras su reunión con el general Musa, está previsto que Harry y Meghan se trasladen al estado de Kaduna (centro), fronterizo con Abuya, para visitar el Hospital de Referencia del Ejército de Nigeria, donde se reunirán con militares heridos.
Ya el sábado, "el equipo del Estado Mayor de la Defensa y el equipo del duque jugarán un partido de voleibol (...) para dialogar con los soldados heridos", detalló el vicemariscal.
Ese mismo día se celebrará una recepción con las familias de los soldados y la pareja cerrará el viaje el domingo en la ciudad de Lagos (sur), con una recepción y una visita a otra escuela para la que financiaron la construcción de una cancha de baloncesto, antes de dejar el país el próximo lunes por la mañana.
Según Marquis, el viaje también incluirá reuniones con los gobernadores de Kaduna y Lagos, Uba Sani y Babajide Sanwo-Olu, respectivamente.
Los duques de Sussex se desplazaron a Nigeria tras una breve visita de Harry al Reino Unido esta semana con motivo del décimo aniversario de los Juegos Invictus. Harry y Meghan decidieron renunciar a sus funciones reales en enero de 2020 para iniciar una nueva vida en California (Estados Unidos), donde residen con sus dos hijos: Archie y Lilibet.