Este pasado miércoles, 7 de febrero, el príncipe Guillermo (41 años) retomó sus compromisos institucionales tras varias semanas apartado de la vida pública para cuidar de su mujer, Kate Middleton (42), quien fue operada de una cirugía abdominal. El heredero, primero presidió una ceremonia de investidura en el Castillo de Windsor y por la noche, acudió a una gala benéfica en Londres, donde se pronunció por primera vez sobre el estado de salud de su mujer y su padre, Carlos III (75), recién diagnosticado de cáncer.
Guillermo se mostró agradecido por los mensajes que ha recibido la Familia Real después de que el Palacio de Buckingham revelara que el monarca padece dicha enfermedad.
"Sinceramente, apreciamos todos los mensajes. Gracias", dijo brevemente el príncipe Guillermo al llegar a la gala del Servicio de Ambulancia Aérea, en el centro de Londres, y donde coincidió con Tom Cruise (61).
Una vez comenzó el acto, el príncipe Guillermo volvió a pronunciarse sobre el duro momento que vive la Corona británica. "Me gustaría aprovechar la oportunidad para decir gracias. También por los cariñosos mensajes de apoyo a Kate y a mi padre. Especialmente en los últimos días. Significa mucho para nosotros", expresó el heredero.
Aunque se trata de una situación difícil, el futuro Rey también recurrió a su sentido del humor irónico, generando risas entre el público presente. "Es justo decir que en las pasadas semanas he estado bastante centrado en cuestiones médicas. Así que he pensado en venir a un acto de ambulancias aéreas para desconectar", añadió.
Cabe destacar que el heredero al trono británico se ha mostrado visiblemente más delgado y en ocasiones, algo serio. Sin embargo, conserva un buen humor. Con el afamado actor Tom Cruise, de hecho, mantuvo una actitud cómplice y no perdió la sonrisa.
El hijo mayor de Carlos III ha tenido que asumir algunas funciones oficiales de su padre mientras éste se somete un tratamiento por el cáncer que le fue diagnosticado recientemente mientras fue intervenido por un agrandamiento de próstata.
Guillermo toma las riendas de la Corona después de que suspendiera sus actividades durante varias semanas para cuidar a su mujer, quien sigue de baja y cuyo estado estado de salud se mantiene en la más estricta intimidad. En todo este periodo, además, el heredero ha estado arropando a sus tres hijos, los príncipes George (10), Charlotte (8) y Louis (5).
El Príncipe de Gales, por otro lado, ha retomado su agenda después de que su hermano, Harry (39), viajara a Londres por menos de 48 horas para ver a su padre. El duque de Sussex mantuvo un encuentro con su progenitor, pero evitó verse con Guillermo.