Los Reyes no han fallado a sus tradiciones y un año más han viajado a Palma de Mallorca para disfrutar del verano. Este año, además de cumplir con sus habituales compromisos, la isla también se habría convertido en el destino de sus vacaciones privadas, a juzgar por las últimas imágenes de la Familia Real a la salida de un cine, en la que Letizia (50 años) se decantó por un estilismo relajado que dista de sus habituales apuestas.
Sin perder la elegancia y el buen gusto, en Palma la Reina suele sacar sus outfits más informales, mostrando una línea cómoda y relax. No hay tacones de aguja ni opulentes joyas ni firmas de lujo. Prima la sencillez y los tonos vibrantes propios de la temporada estival y de un ambiente de mar. Este año no ha sido la excepción y Su Majestad ha optado por piezas fluidas, coloridas y de máximo confort.
En su maleta de Palma Letizia ha incluido, sobre todo, vestidos y zapatos planos. También unos shorts vaqueros, una prenda con la que no se muestra en sus días de Reina. Por otro lado, ha seguido apoyando al comercio local, sumando nuevas prendas a su armario, confeccionadas en las Baleares.