La primera boda real del año se ha celebrado este domingo 12 de marzo y ha tenido como protagonista a la princesa Iman (26 años), hija del rey Abdalá (61) y Rania de Jordania (52), en palacio de Beit Al Urdun. La joven le ha dado el "sí, quiero" a su prometido, Jameel Alexander Thermiotis, en una preciosa ceremonia a la que han asistido 150 invitados y que ha sido retransmitida por la televisión jordana.

La novia llegaba del brazo de su hermano mayor, el príncipe heredero Hussein bin Al Abdullah (28), que también se casa este mes de junio. Lucía un vestido blanco de estilo clásico, con escote cuadrado y detalle de encaje, manga larga y terminado en cola. El velo, también de encaje floral y una elegante tiara remataban el estilismo nupcial. Iman ha elegido una joya discreta, salpicada de diamantes, aunque se desconoce si era nueva o pertenecía a la familia. La joven era recibida con cánticos tradicionales durante el paseíllo hasta encontrarse con el novio.

Los Reyes han sido los encargados de recibir a los asistentes. Rania, emocionada y muy feliz, se convertía en la otra gran protagonista del día, haciendo gala una vez más de su impecable estilo. Había elegido un vestido plisado en color maquillaje de manga tres cuartos, el pelo suelto y un sencillo bolso blanco como accesorios. Una vez terminada esa pequeña recepción, se han adentrado en el salón del palacio para ocupar sus respectivos asientos, en primera fila.

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La ceremonia nupcial ha sido breve y sencilla, oficiada por el imán, en la cual se han intercambiado los anillos y expresado su intención de contraer matrimonio. Después han venido las felicitaciones y los abrazos. La reina de Jordania, visiblemente emocionada, se ha fundido en un cariñoso abrazo con su hija, cerrando los ojos y sujetándola con fuerza. Rania ha estado muy pendiente de todos los preparativos del enlace, cuidando al máximo la decoración, con elegantes flores blancas.

Previamente al enlace, el pasado 7 de marzo había tenido lugar la tradicional fiesta de la henna, en la que Iman estuvo rodeada de toda su familia. Para la ocasión lució un vestido túnica blanco, con un cinturón que pertenecía a su madre y que llevó el día de su boda. Por su parte, Rania eligió uno de sus preciosos caftanes con zapatos de Dior.

Iman es la hija mayor de los Reyes, la primera que se casa, por lo que el enlace ha sido muy especial para la familia. Su compromiso se anunció casi por sorpresa en julio de 2022, presentando oficialmente al afortunado, el empresario de ascendencia griega Jameel Alexander Thermiotis, un exitoso hombre de negocios de ascendencia griega que es socio de Venture Capital Fund en Nueva York. 

En solo tres meses, Abdalá y su esposa volverán a ser protagonistas de otra boda real, la de su primogénito. Al ser el heredero se espera que se trate de un enlace mucho más multitudinario y con mayor presencia de invitados reales, como corresponde al puesto que ocupa en la línea sucesoria.