Este pasado miércoles, 8 de febrero, los Reyes pusieron fin a su visita de Estado en Angola y emprendieron el viaje de vuelta a Madrid. Así terminaron una travesía de tres días intensos en los que Letizia (50 años) lució hasta seis estilismos. Desde el más cómodo, hasta el más sobrio y sofisticado. 

    La maleta de Letizia fue bastante variada. Llevó varios looks que ya eran conocidos y espectaculares piezas de estreno con las que acaparó todas las miradas. La más llamativa, la blazer de estilo africano con el que hizo un guiño a los angoleños. La Reina también recurrió a sus colores favoritos y a la fórmula black and white, un infalible con el que siempre acierta. 

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    Estilo cómodo y efímero

    El pasado lunes, 6 de febrero, los Reyes fueron despedidos con honores en el aeropuerto de Barajas para emprender un visita de Estado a Angola, la primera a un país de África subsahariana. Entonces la Reina se mostró con un look propio del invierno y perfecto para las casi siete horas de vuelo que le esperaban. 

    Letizia optó por la comodidad y eligió unos pantalones negros de talle recto y un abrigo de Mango a tono. Para romper con el monocolor, se decantó por un jersey de cuello vuelto en tono fucsia. Como complemento, unas botas de tacón grueso, perfectas para su dolencia, y los pendientes de aro inspirados en las cañas de bambú que comparte con su hija Leonor. 

    Fue un estilo efímero, ya que en pleno vuelo se cambió de ropa para aterrizar en Angola con un estilo mucho más acorde a sus altas temperaturas. 

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    Todo al rosa

    Letizia bajó del avión vestida de verano. Lo hizo con un look monocolor a juego con la corbata del rey Felipe VI y con un toque extra dulce. El outfit estaba formado por una blusa de Hugo Boss satinada, de manga corta y con picos asimétricos, y un pantalón confeccionado en el mismo tejido, de talle alto y corte pirata. Lo completó con un bolso de Carolina Herrera en rosa palo, también de estreno. Los zapatos, en cambio, forman parte de su vestidor desde 2016. Están firmados por Magrit. 

    En sus joyas no hizo ningún cambio. La Reina llegó a Angola con los mismos pendientes de aro que lució en el aeropuerto de Madrid. 

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    'Look' flamenco

    Para sus citas del pasado martes, 7 de febrero, Letizia eligió un look con toque cien por cien español. La Reina se decantó por un vestido de lunares firmado por el diseñador de ropa flamenca José Hidalgo que ya había lucido con anterioridad. Se trata de una creación exclusiva para ella, realizado en punto de seda, de manga corta y largo midi. Lo completó con unos altísimos salones negros de Prada y el modelo Mini Doma Insignia Satchel de Carolina Herrera. 

    Lo único que estrenó fueron los pendientes: unas perlas colgantes de un aro en oro blanco que le dieron un toque muy sutil y elegante. Como joya también llevó el anillo 'amor y love' que se ha convertido en uno de sus imprescindibles. 

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    Un complemento extra

    En uno de los actos de la jornada, Letizia tuvo que añadir un complemento extra a su estilismo flamenco, probablemente por el frío provocado por la baja temperatura del aire acondicionado. Letizia solucionó el inconveniente recurriendo a una pashmina negra, acorde con el look

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    La fórmula infalible

    El 7 de enero es una fecha muy triste para la reina Letizia. Un día como este, pero en 2007, falleció su hermana Érika. Por ello no resulta extraño que esta jornada se haya decantado por los colores asociados al luto, primero con el vestido de lunares, y después con un look noche sencillo y discreto. El blanco y negro, además de asociarse a los tonos de respeto, es una fórmula infalible y elegante. 

    Letizia se decantó por ella eligiendo una blusa cruzada blanca, de manga larga y con escote pico, y una falda negra del mismo estilo. Ambas piezas de estreno las combinó unos salones y bolso tipo sobre, a tono. La dos estaban firmadas por Carolina Herrera, una de sus diseñadoras de cabecera. 

    Como joyas sólo escogió unos pendientes terminados en bola de diamantes que, si bien forman parte de su joyero desde hace tiempo, no los luce con tanta frecuencia. Quedaron al descubierto gracias a su melena recogida en un moño trenzado

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    Guiño a África

    El esperado guiño de Letizia a África se hizo esperar. En su último día en Angola, la Reina visitó la maternidad Lucrecia Paim junto a la primera dama con un conjunto de pantalón y chaqueta en color blanco con el que rindió homenaje a los angoleños. La pieza superior fue la más llamativa del look: una blazer con volumen y decorada con ribetes estampados en cuadro vichy negros, cuya forma estilo sahariano permitía atarla a la cintura. La parte de abajo era un diseño ligeramente baggy

    Para completar el outfit, la Reina rescató un clásico calzado de su armario de verano: el modelo en blanco de Macarena Shoes que se convirtió en un imprescindible de la pasada temporada estival. 

    Letizia remató el look con unos sencillos y elegantes pendientes, además del anillo 'amor y love', su nuevo favorito. 

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    Vestido comodín

    Si en su llegada a Angola se decantaba por un total pink, en su despedida hizo lo propio pero vistiendo todo al rojo. La Reina no podía despedirse de África sin llevar su color fetiche.

    En poco tiempo, Letizia cambió el blanco por su color favorito al momento de vestir, ya que le esperaba un último acto junto al Rey y la pareja presidencial. En concreto, eligió un vestido comodín -de esos que siempre sientan bien- firmado por Massimo Dutti y que data de la colección otoño-invierno de 2018. Es un modelo hecho en satén, con manga larga y falda drapeada que le aportaba movimiento. Lo completó con unos slingback de ante, firmados por Carolina Herrera, y un bolso de mano que seguían la misma tonalidad. 

    Como joyas eligió los pendientes de diamantes y rubíes de Gold & Roses que estrenó el pasado octubre y su anillo Coreterno. 

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