La mudanza de la reina Isabel II (96 años) al Castillo de Windsor el pasado mes de mayo trastocó los planes de toda su familia. Buckingham no solo ha dejado de ser su residencia habitual, sino que ahora todos aquellos que se quieran dar cita con la monarca tienen que recorrer los 35 kilómetros que separan ambas ubicaciones reales. 

Mientras que gran parte de su entorno parece no tener problema en desplazarse cuando sea necesario, el príncipe Guillermo (40) y Kate Middleton (40) han optado por seguir sus pasos y también tienen previsto instalarse en el condado de Berkshire, donde está situado Windsor. 

Elegir un nuevo hogar -al que se mudarán el próximo mes de septiembre- no es una tarea que los duques de Cambridge se tomen a la ligera y ya llevan varias semanas mirando dónde pueden asentarse junto a sus tres hijos, George (9), Charlotte (7) y Louis (4). Tras estudiar diferentes opciones, parece que han optado por Adelaide Cottage, una casa situada a apenas unos minutos a pie de donde actualmente vive Isabel II y que antaño fue la casa de vacaciones de los duques de Sussex.

Sus planes de mudanza, sin embargo, tienen un pequeño 'pero' pues el príncipe Andrés (62) también ha mostrado su interés en la propiedad. No para él, sino para su hija pequeña, la princesa Eugenia (32), que en la actualidad vive en Frogmore Cottage junto a su marido y su hija.

El problema radica en que Frogmore sigue perteneciendo al príncipe Harry (37) y Meghan Markle (40), quienes antes de su traslado a Estados Unidos llegaron a un acuerdo para seguir manteniendo la propiedad. En noviembre de 2020, un año después de abandonar Reino Unido, se la cedieron a Eugenia y su marido, que están buscando un hogar que sea únicamente suyo.

Así lo han asegurado fuentes cercanas al duque de York al diario Daily Mail, donde se ha desvelado que "antes del escándalo, la intención del príncipe Andrés era asegurar que la propiedad sea de su hija". Pero el escándalo sexual que protagonizó lo ha cambiado todo y parece que serán los Cambridge los que se muden ahí. De momento no hay nada decidido y este 'enfretamiento' continúa abierto. 

Adelaide Cottage está ubicada en el corazón del parque real Crown Estate y fue construida en 1831 como un refugio para la mujer de Guillermo IV, la reina Adelaida de Sajonia. Años más tarde se convertiría en la casa favorita de otra reina, Victoria, que se trasladaba a ella de manera frecuente. Sin embargo, su residente más famoso fue Peter Townsend, quien fuera novio de la difunta princesa Margarita, hermana de Isabel II. 

Cambio de vida

Al mismo tiempo que buscan casa, el príncipe Guillermo y Kate Middleton están también buscando nuevos colegios para sus hijos ya que, de mudarse, sería inviable que continuasen en sus actuales centros por encontrarse muy lejos. De momento, según los medios británicos, habrían visitado varias escuelas en los condados de Ascot, Buckinghamshire, Windsor y Surrey.

Las ventajas de esta mudanza no solo residen en que los Cambridge estarían más cerca de Isabel II, también de los padres de Kate, Michael (72) y Carole Middleton (67), que viven en Bucklebury, en el condado de Berkshire, a menos de 50 kilómetros. La familia estaría también más cerca de la hermana de la duquesa, Pippa Middleton (38), que vive en el mismo pueblo junto a su esposo, James Matthews (46) y sus dos hijos. 

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