Último día de trabajo para la reina Letizia (49 años), quien este miércoles 27 de julio ha cumplido con el último acto programado de su agenda oficial antes de sus vacaciones, o por lo menos antes de partir a Mallorca. Como ya se ha contado muchas veces, la monarca sigue considerando trabajo su estancia en la isla balear desde el momento y hora en el que tiene que seguir cubriendo algunos actos públicos.
Antes de su llegada al palacio de Marivent, la esposa de Felipe VI (54) ha presidido la reunión de trabajo sobre Salud Mental en la sede de UNICEF Comité Español de Madrid.
En la reunión se ha abordado la problemática de la salud mental en niñas, niños y adolescentes y se han analizado los compromisos para aumentar la inversión en este ámbito con el objetivo de promover el bienestar de la infancia y sus cuidadores. Para ello, Letizia se ha reunido con expertos del ámbito científico y preventivo en el sector y con algunos padres para conocer las dificultades a las que se enfrentan cuando un hijo padece este tipo de problemas.
Letizia ha llegado muy sonriente al acto que ha comenzado a las 11:30 de la mañana. Quizás su sonrisa, un tanto pícara, era debida a la sorpresa estilística que tenía preparada, ya que 'ha robado' a su hija Leonor (16) un vestido de su armario.
De hecho, hace escasas semanas que la Princesa lucía esta misma prenda. Era el pasado 26 de junio, en la primera aparición pública de la heredera al trono tras su estancia en Gales para cumplimentar su primer año de estudios en el Atlantic College. Leonor, junto a su hermana la infanta Sofía (15) y los Reyes, asistían al espectáculo flamenco De Sheherazade en los Teatros del Canal con el vestido camisero que este miércoles lleva Letizia.
Se trata de una prenda muy veraniega y con estamapado étnico de la marca española Dándara. Su precio actual es de 39,99 euros pero antes de las rebajas costaba 59,99. Lleva la cintura marcada con un pequeño cinturón de tela, que es una de las cosas que más le gusta a la Reina a la hora de vestir.
Letizia lo ha combinado con unas alpargatas de esparto de cuero de color marrón de Uterqüe, que ya estrenó en 2019 y que las hemos visto en infinidad de ocasiones. En su momento costaron 89 euros.
Como joyas, ha rescatado unos pendientes en forma de rombo y con diamante amarillo en el centro, que tiene en su joyero desde el año 2005; y ha vuelto lucir el anillo de Karen Hallam que no se quita. Ha optado por dejar de nuevo su melena al viento y en esta ocasión no ha llevado ni bolso ni cartera de mano.
La próxima vez que la Reina se deje ver ya será en Palma donde el próximo domingo 31 de julio acudirá a la gala de clausura de la 12ª edición del Atlàntida Mallorca Film Fest 2022 en el Centro Cultural La Misericordia.
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