Froilán (24 años) ha reaparecido por las calles de Marbella cuatro días después de ser testigo involuntario del tiroteo que se produjo en la discoteca Opium. El sobrino de Felipe VI (54) estaba celebrando su cumpleaños con amigos en el famoso establecimiento playero cuando una disputa terminó a balazos, llevando directamente a cinco personas al hospital.
El joven salió ileso de los altercados después de que se escondiera detrás de uno de los sofás de la zona VIP tras escuchar los primeros disparos, según reveló Informalia. El susto fue tremendo.
Este jueves, 22 de julio, se le ha podido ver paseando tranquilamente por las calles de la localidad malagueña con otros dos chicos de su edad. Cubierto con una gorra para protegerse del sol a la vez que de las miradas indiscretas, el nieto del rey Juan Carlos (84), de primeras, no ha querido hacer ningún tipo de declaraciones a la prensa. Sí ha regalado una sonrisa a los fotógrafos transimitiendo calma y serenidad antes los hechos en los que se vio envuelto.
Ya a su llegada a Madrid, y tras la insistencia de los reporteros, ha comentado que se encontraba bien: "Estoy muy bien, vivito y coleando. Ya te vale ¿no?", ha recriminado a la periodista que le hacía las preguntas. La 'conversación' ha terminado con un portazo de Froilán mientras decía: "Nada, nada, ya está, ya está", "Venga, chao, un besito" y "Chao, venga, un besito".
Su familia se enteraba de la noticia del tiroteo desde la distancia. Su padre, Jaime de Marichalar (59), era puesto al tanto de lo sucedido desde Ibiza, lugar donde se encuentra disfrutando de sus vacaciones y donde se le ha podido ver en la cubierta de un barco surcando las aguas baleares junto a su amiga Susana Uribarri. Por su parte, la infanta Elena (58) estaba en Madrid, mientras que Victoria Federica (21) se encontraba en Sanlúcar de Barrameda. Todos han optado por mantenerse al margen del suceso sin dar ningún tipo de declaración pública.
Froilán ha finalizado sus vacaciones en Marbella, una de sus ciudades preferidas para los días de asueto. Tanto, que en plena pandemia cuando estaba prohibido viajar, él y su hermana se saltaron las restricciones y el confinamiento para alojarse en la ciudad andaluza.
Los hechos
El suceso se produjo en la pasada madrugada del domingo 17 de julio al lunes 18. Sobre la 1:00 horas, el 112 recibió varias llamadas alertando de que se había producido un tiroteo en una discoteca ubicada en el kilómetro 184 de la autovía A-7 y advertían de que había heridos, por lo que se movilizó a la Policía Nacional, Local y sanitarios, según informó EFE.
Cuando comenzó la pelea estaba pinchando el reconocido DJ sudafricano Black Cofee. Los balazos se saldaron con cinco heridos, uno de ellos fue el presunto autor de los disparos, un hombre de unos 40 años, que sufrió heridas de arma blanca en el tórax y la cabeza. El Juzgado de Instrucción número uno de Marbella ha acordado su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza, junto a otro detenido.
La discoteca Opium Beach, donde tuvieron lugar los hechos, continúa cerrada hasta que concluya la investigación. Uno de sus dueños, Javi Calle (expareja de Alba Díaz), ha emitido un comunicado mostrando su consternación por lo ocurrido: "Sinceramente, no tengo palabras para describir lo sucedido, lo que sí tengo es dolor, consternación y tormento. Son momentos muy duros y delicados por los que nadie debería pasar nunca".