Fue al inicio del verano de 2021 cuando se dio a conocer la noticia del embarazo de Telma Ortiz (48 años). Sin embargo, pasaron solo 52 días y ya se anunció el nacimiento del bebé. Se trataba de una niña, la segunda para la hermana de la reina Letizia (49), pero la primera con su actual pareja, el abogado Robert Gavin Bonnar (54).
Hace diez meses que la hija de Paloma Rocasolano (70) volvió a experimentar la maternidad, pero en todo este tiempo no había trascendido el nombre que habían escogido para la pequeña. El secretismo terminó este pasado fin de semana cuando Carmen Duerto, periodista especializada en Casas Reales, desveló el misterio en su columna de El Debate.
Erin. Así es como se llama la hija de Telma y Robert, un nombre que esconde un bonito homenaje a la tierra natal del letrado, Irlanda. Erin es de origen gaélico y sirve para denominar de forma poética el territorio irlandés, al que se conoce como Éire. Otra de las acepciones hace referencia al término "belleza".
Existe también otra traducción para Erin que significa "de la isla al oeste" y se apunta, asimismo, que es el nombre del lugar en el que se produce la primera ola del mar. Esta vinculación a Irlanda y a todo lo que lo rodea hace que sea un nombre muy escuchado en el país. De hecho, actualmente se encuentra en el puesto 44º del ranking de los más populares entre los irlandeses, una posición muy destacada en el listado. Aunque, cabe destacar que este nombre está más presente en ciudades grandes como Dublín, que en localidades más pequeñas y más alejadas de la capital.
[Sale a la luz el nombre de la hija de Telma Ortiz casi un año después de su nacimiento]
"Es un nombre muy típico aquí, se escucha mucho", confirma una profesora de infantil española que se asentó en la capital irlandesa hace más de una década. Desde su experiencia, en contacto constante con menores de corta edad, la fuente afirma que es un nombre unisex: "Se pone tanto a niños como a niñas, aunque últimamente se usa más para niñas".
Teniendo en cuenta que se trata de la sobrina de una Reina, este diario quiso conocer si Erin es un nombre típicamente ligado a descendientes de familias adinerados o con poder o si, por el contrario, es de uso cotidiano en cualquier sector de la ciudadanía. "No distingue entre clases sociales, lo usan desde las familias mejor posicionadas hasta los más humildes", confirma otra maestra a cargo de niños irlandeses.
Lejos de la capital, en los coquetos pueblos de la Irlanda más profunda, apenas se ha oído hablar del nombre de Erin. No está presente de forma destacada en los colegios, porque en estos lugares triunfan mucho más las nuevas formas en las que ha derivado ese mismo nombre, que son Maeve y Delaney.
Erin y todos sus derivados son nombres vinculados a una personalidad muy fuerte. Según desvelan las voces que son expertas en desgranar el carácter que hay detrás de determinados nombres -y que de alguna manera influyen en la persona que los tiene-, aseguran que Erin hace referencia a una líder nata, altamente enfocada en su propósito y siempre orientada al logro. Son capaces de hacer frente a cualquier obstáculo con la finalidad de llegar a probar cosas nuevas. También son mujeres enérgicas y confiadas.
Uno de los puntos que más se destacan de la personalidad ligada a Erin es lo esencial que es la libertad en su modo de vida y en su felicidad. La curiosidad también está muy presente en las mujeres bautizadas bajo en nombre de Erin, por ello les encanta viajar, conocer nuevos amigos y vivir nuevas experiencias. Ese carácter libre hace que les resulte difícil comprometerse.
[Primeras imágenes de Telma Ortiz, la hermana de la reina Letizia, junto a su hija de seis meses]
Debido a su espíritu aventurero, las niñas Erin dejan a un lado la coquetería y se centran en lo funcional, ya sea en términos de trabajo como a la hora de vestir. Son personas estimulantes, habladoras, carismática y muy creativas que consiguen atraer a las personas y al éxito.
Pese a que se enfocan fielmente en su carrera, no descuidan su ocio, y según se redacta en textos de analistas expertos en la perspectiva de carácter que irradian los nombres, las Erin son personas fiesteras, activas e inquietas. Tienen una mente muy despierta y una inteligencia aguda que hace que sea difícil que otros las engañen.
Quienes estudian la etimología de los nombres se arriesgan a vaticinar qué tipo de vocación va ligada a las niñas Erin, y apuntan a que las salidas laborales que van acordes a su personalidad y potencial son las de ingeniera, escritora, compositora de música, profesora, diseñadora, arquitecta, planificadora o presidenta de una empresa líder del sector. Sin embargo, aún es muy pronto para conocer el destino de la pequeña Erin Gavin Ortiz, habrá que esperar a verla crecer y tomar su propio camino.