La reina Letizia (49 años) se encuentra en la cuna de la Monarquía. Es cierto que la británica no es la primera de la historia, pero ahora mismo, Isabel II (95) es la soberana madre de todas las demás. Sin embargo, Letizia no ha acudido a Inglaterra a ver a su "querida tía Lilibeth" (como la llamaron con cariño en el mensaje de pésame que le enviaron cuando falleció el duque de Edimburgo), sino a inaugurar una exposición sobre Zurbarán.
La esposa de Felipe VI (54) ha viajado este martes, 5 de abril, hasta la campiña inglesa, en el condado de Durham, donde la muestra Zurbarán: las doce tribus de Israel, Jacob y sus hijos abrirá las puertas al público en su imponente castillo. Y todo castillo necesita un Rey o en este caso un Príncipe. Y para recibir a Letizia estaba nada más y nada menos, que el de Gales, el príncipe Carlos (73).
La Reina ha viajado sola a este encuentro con el heredero al trono británico. A su llegada, Letizia ha recibido todo el cariño del príncipe Carlos, que le ha dado dos besos y otro en la mano en señal de respeto. Se trata de un acto de día y no muy protocolario, aunque con la Casa Real Británica todo es protocolo, y la experiodista ha elegido la fórmula vestido abrigo que tan bien le funciona.
La reina Letizia ha lucido un total look rojo con vestido de manga larga, cartera y salones junto con un abrigo de paño para las bajas temperaturas. Se trata de un modelo nuevo, elegante y sencillo que se ajusta a su cuerpo y que el único detalle que tiene son unos botones negros tanto en el hombro derecho como en el izquierdo. El patrón está creado para que se ciña a su cintura, lo que más le gusta a Letizia.
Este martes, ha elegido unos pendientes de Chanel, de oro blanco y diamantes valorados en 6.000 euros, que se han visto a la perfección gracias al peinado semirrecogido que ha lucido. No es que le quede mal el cabello así, es que en esta ocasión no acababa de encajar. Como complementos ha elegido unos salones y una cartera de mano a juego con el vestido firmados por Magrit.
En marzo de 2019, Letizia y Carlos también coincidieron en la inauguración de una exposición de otro genio español en suelo británico. La mujer de Felipe VI viajó en solitario a Londres para inaugurar en la National Gallery la exposición Sorolla, maestro de la luz, una retrospectiva del pintor impresionista valenciano. Se da la circunstancia de que el primogénito de Isabel II es un apasionado de las artes y es un gran pintor que ha exhibido algunos de sus trabajos pictóricos en exposiciones.
[Más información: El rifirrafe de las reinas Letizia y Sofía, cuatro años después: así ha cambiado la vida de la Familia Real]
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