Dice el refrán que donde fueres, haz lo que vieres. Y parece que la reina Letizia (49 años) se lo ha querido aplicar en su primera aparición en suelo sueco, luciendo un look muy Reina de las Nieves, con brillo y todo, en plan Frozen.
Los reyes, Felipe VI (53) y Letizia, han arrancado su visita de Estado a Suecia con la tradicional reunión con la colectividad española en el país, es decir, con los españoles que viven en Suecia. La cita ha tenido lugar en la residencia del embajador español en Estocolmo, el lugar donde Sus Majestades se van a alojar.
Para conocer la realidad de los españoles en la capital sueca, la reina Letizia ha elegido un vestido blanco, pero sin duda lo que más ha llamado la atención han sido las medias brillantes.
La reina Letizia ha lucido vestido blanco, perlas y diamantes.
Nuestra Reina es una mujer sin término medio. En España no suele llevar panties, algo que en el frío sueco es impensable. Así que si tiene que ponérselas, que todo el mundo las vea, bien de brilli-brilli, como las llevaría cualquier princesa Disney.
El brillo de las medias desentonaba un poco con la pureza y sencillez del blanco del vestido. Para su primera salida en Suecia, Letizia ha repetido diseño. Aunque no se sabe la aguja que lo firma, se trata de la una prenda que ya hemos visto en otras dos ocasiones. Es de color hueso, con manga larga, bajo asimétrico que termina en pico, va marcado a la cintura y es de cuello redondo.
Las medias de fantasía de la reina Letizia.
La esposa de Felipe VI lo estrenó en febrero del 2020 para asistir a la apertura de la XIV legislatura y lo volvió a lucir, casi un año después, para la insólita entrega del Premio Cervantes en Barcelona a Joan Margarit. En la jornada de este martes, hasta las joyas han sido Frozen total gracias a los pendientes de perlas australianas y brillantes que ha elegido para su estreno en Suecia.
La reina Letizia con cartera de mano de Magrit y anillo de Karen Hallam.
Lo peor es que el anillo de Karem Hallam también ha viajado en el avión de los Reyes hasta el país nórdico y se lo ha puesto. Tanto los zapatos como la cartera son de la firma española, Magrit. Han sido unos salones de piel de pitón con tachuelas, a los que recientemente añadió una suela de goma para hacerlos más cómodos, y una cartera de mano cuadrada a juego.
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