La reina Isabel II celebra este miércoles, 21 de abril, su 95 cumpleaños. Un aniversario triste para ella que, hace tan solo cuatro días, enterraba a su marido, el duque de Edimburgo. Aprovechando esta fecha tan señalada para ella, ha querido mandar un mensaje de agradecimiento a todos aquellos que han arropado a su familia tras la pérdida del duque. "El mensaje de la Reina a personas de todo el mundo que han enviado homenajes y mensajes de condolencia tras la muerte del duque de Edimburgo", introduce en un tuit el perfil oficial de la casa real británica, bajo el que se sitúa un escueto comunicado de Isabel de Inglaterra.

"Con motivo de mi 95 cumpleaños he recibido muchos mensajes con buenos deseos, que aprecio mucho. Si bien como familia estamos atravesando un periodo de gran tristeza, ha sido un consuelo para todos nosotros ver y escuchar los homenajes que se le han rendido a mi esposo, dentro del Reino Unido, de la Commonwealth y de todo el mundo. Mi familia y yo queremos agradecer todo el apoyo y las muestras de bondad recibidas en los últimos días. Nos hemos sentido profundamente conmovidos y seguimos recordando que Phillip tuvo un impacto tan extraordinario en numerosas personas a lo largo de su vida", son las líneas que ha querido compartir con el mundo a través de Twitter.

Tal y como se ha revelado, la monarca, que cumple años por primera vez en 70 años sin tener a su lado al duque de Edimburgo, lo pasará sola en el Castillo de Windsor, donde se instaló con su marido poco después de que comenzara la pandemia. Tan solo un reducido grupo de personal que trabaja para ella estará a su lado en un aniversario marcado por el luto que no abandonará hasta el próximo viernes, cuando se cumplan las dos semanas de la muerte de Felipe de Edimburgo.

De hecho, en las últimas horas se ha conocido que su nieto el príncipe Harry (36), que voló hasta Reino Unido para estar presente en el sepelio de su abuelo, no se ha quedado al cumpleaños de Isabel II. Ha regresado a California junto a Meghan Markle (39), y su hijo, Archie (1). 

La Reina se enfrenta ahora a una nueva vida. Sola y sin su gran amor: "Él ha sido, sencillamente, mi fortaleza y mi permanencia todos estos años. Y yo, y toda su familia, y este y muchos otros países, le debemos una deuda mayor de la que jamás reclamaría, o que nunca sabremos".

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