Marivent es para la familia real lo que para el resto de los mortales la casa del pueblo. Después de unos veranos de notables ausencias, éste puede ser el año en el que se reúna toda la familia en Mallorca. Todos menos la infanta Cristina (51 años) y su marido, Iñaki Urdangarin (48), a la espera de que se dicte la sentencia del juicio por el caso Nóos.
Atrás quedan las mediáticas llegadas de los reyes y su descenso por las escalerillas del avión para grabar la pisada real en suelo mallorquín a pie de pista. El desgaste de don Juan Carlos (78) puso fin a las inauguraciones oficiales del verano. Y las vacaciones de los reyes dejaron de ser publicadas.
La reina Sofía (77) es la primera en llegar y la última en irse. Duerme en el palacio de Marivent desde hace una semana, a la espera de que, por goteo o en tromba, desembarque en la isla la nietada real. La situación política marcará la agenda de Felipe VI (48) y, aunque se espera su presencia en la 35 edición de la Copa del Rey de Vela, que arranca el sábado, no hay fecha concreta para su viaje a la capital balear.
El inicio de la regata coincide, este año, con el cumpleaños de la infanta Pilar de Borbón, asidua a la isla desde hace décadas. La hermana del rey Juan Carlos soplará 80 años este sábado rodeada de familia y amigos en la fiesta que dará mañana en su casa de la urbanización Sol de Mallorca. No hay información oficial sobre la asistencia de ningún miembro de la familia real a la celebración, dado que se enmarca dentro del ámbito personal y privado. Pero en la isla se espera la presencia, en la fiesta, de los reyes eméritos y de los actuales.
En la Escuela de Vela de Calanova, a escasos metros del palacio de Marivent, está todo listo para la llegada de los hijos de la infanta Elena (52). Felipe (Froilán) (18) y Victoria (15) acudirán al curso de vela a principios de semana y a mediados ya les acompañarán sus cuatro primos, hijos de la infanta Cristina.
Y en su 35 edición bate récords de participación. Por primera vez en la historia de la Copa, 130 barcos de 19 países surcarán aguas mallorquinas. En el Real Club Náutico de Palma 205 personas trabajan a destajo para preparar las regatas desde suelo firme. 95 velarán por el control y la seguridad desde el agua.
Uno de los platos fuertes es el catamarán volador de la clase GC32, la nueva modalidad que introduce la copa en esta edición. Pierre Casiraghi (28), hijo de Carolina de Mónaco (59), es el capitán del Malizia. Otra de las citas que congrega cada año más atención es la tradicional cena de Armadores, que se celebrará el jueves 4 de agosto, también conocida como la noche en blanco, abierta en los últimos años a personas de reconocido prestigio empresarial como los presidentes de BMW Ibérica o de la firma Montblanc. Acudirán, también, representantes del mundo artístico, como el pintor y actor Jordi Mollà (48), la actriz Natalia Verbeke (41), el cocinero Martín Berasategi (56), Fiona Ferrer (42), Carla Goyanes (33) y Olivia de Borbón (42).