Los fans se agolpan para besar (y dar la enhorabuena) a Iñaki y Aitor, los hermanos gemelos, maestros de la costura y componentes de Ailanto, la marca española que augura las mejores críticas (con permiso de Juan Vidal) en el segundo día de la pasarela Cibeles. En el futurista kissing room aparece como una exhalación una figura muy conocida en los círculos políticos, pero que pasa totalmente desapercibida entre los groupies del circuito de la moda. Una sofisticada señora alta con pelo ondulado -recién llegada de una peluquería cool- y bolso Chanel. Discreta, sofisticada y alta. Muy pocos la reconocen, es Begoña Fernández, mujer del (que parece) próximo presidente de España. Junto a su grupo de amigas Begoña disfrutaba de la fiesta de la moda española.
Nadie se entera de la existencia de la ¿futura primera dama? en el vanguardista (pero oscuro) kissing room, donde los vips dan la enhorabuena a los diseñadores entre cócteles de ginebra.
La mujer del jefe del ejecutivo socialista observó desde primera fila los desfiles de Ana Locking y Ailanto. Begoña no quiso responder a las preguntas de la prensa. Guarda silencio hasta que el panorama político se aclare. La primera dama (ante las últimas noticias es más acertado afirmarlo) es distante y no quiere hablar. Si se cumplen las expectativas cumplirá un papel fundamental en una etapa delicada de nuestro país. Tendrá que abrirse más.
El viernes estuvo en la Madrid Fashion Week Cristina Cifuentes donde se paró con aquellos que deseaban verla (y besarla). Se hizo selfies con todos los grupos de jóvenes fashionistas que se lo pedían. Sonreía relajada cuando posó con los diseñadores. No se sabe si este gesto es natural o premeditado, fruto del merchandising político, pero público y prensa lo agradecen.
¿El último cotilleo de la pasarela? Marta Ortiz, la modelo consagrada que desfila estos días en Cibeles y que consiguió salir en el show de Chanel, podría estar saliendo con Vicente Cebrián (dueño de las bodegas Marqués de Murrieta), ex de Eugenia Martínez de Irujo y de María León. Si así fuera formarían una de las parejas de guapos a seguir este verano.
En la Fashion Week de Madrid se respira un ambiente aperturista y desenfadado. Topacio Fresh, Natalia Ferviú y Aless Gibaja son sus mayores exponentes. A Fresh le llega un mes de marzo repleto de trabajo en el que expondrá en la Térmica de Málaga App and down, en una sala donde se encuentran las obras de Frida Kahlo. Ya en Madrid celebrará los siete años de su nueva galería con una exposición sobre formatos digitales.
Natalia Ferviú se encuentra pletórica tras las campanadas de Telecinco. Sigue a tope con Cámbiame y las producciones que realiza para prestigiosas cabeceras de moda. "Hay que gustarte mucho, tenerlo muy claro y no hacer caso a los agoreros. Ser constante y tenaz", es el consejo de Natalia para las principiantes que se quieran adentrar en el mundo de la moda. "No hay que cesar. Es muy importante la perseverancia. Constancia, trabajo duro y soñar, que es gratis. La base de la creatividad son los sueños", sentencia. Hay que recordar que Natalia ya era una célebre estilista y DJ antes de saltar a la palestra telivisiva y ser conocida para los espectadores.
"Criticar es gratis pero te tiene que importar el entorno personal y profesional. Gustar a todos es horrible. Mi secreto es ser real. Me muestro distendida. Tal y como soy", aclara sobre los que tengan algo que decir de su expresiva intervención en la Nochevieja de Telecinco.