Que los creativos nunca se han llevado bien con los números no es ningún secreto pero, cuando nos encontramos ante un gran grupo empresarial que succiona una marca creativa, original y pequeña; Entonces destapamos el problema imperecedero de la moda universal. Sybilla siempre enigmática e huidiza a partes iguales dejó a los fundadores de Jazztel el manejo de toda la marca (Sybilla y Jocomomola).
"Me siento honrada y muy emocionada por este premio que llega en un momento muy especial. Agradezco muchisimo a mi equipo todo su esfuerzo y entusiamo, este premio es para todos los que han colaborado en hacer esta vuelta posible y para todos los que creyeron en mi, sin ellos nunca hubiera sido posible", ha explicado a EL ESPAÑOL la modista.
"Es el próximo Balenciaga", hace dos décadas el eterno chascarrillo era omnipresente pero, la diseñadora y fundadora de la marca acabó retirándose a su amada Mallorca (como tantos otros virtuosos del diseño- Miguel Adrover lo suscribe) dejando atrás las expectativas fundadas. Pero, el pasado menos nostálgico vuelve con marca fetiche, mismo nombre y premio bajo el brazo.
El Premio Nacional de Diseño de Moda 2015 ha recaído sobre la neoyorquina como un avance de su nueva andadura. Seguramente el jurado de expertos y entendidos en la materia haya tenido mucho que ver en un valiente y arriesgado paso. Manuel Blanco, director académico de la única carrera oficial impartida en una universidad pública, Helena López del Hierro, directora del Museo del Traje o Yolanda Sacristán, directora de Vogue España, entre otros, han reconocido el arduo trabajo de la artista.
El premio dotado con unos míseros 30.000 euros no resolverá el futuro de Sybilla pero, si imprimirá las fuerzas necesarias para mantenerse. Tal y como reza la nota de prensa del Ministerio de Cultura, Sybilla ha colaborado con enfant terribles como Yves Saint Laurent, Martin Margiela o Jean Charles de Castellbajac. Japón siempre ha sido el país que la ha apoyado (y comprado) incondicionalmente las sucesivas colecciones que abarcaron desde ropa de cama a complementos pasando por su requerido pret-a-porter. Además, ha creado en 2015 el sello "Fabrics of Freedom con el que pretende sensibilizar a la industria textil sobre el consumo de tejidos responsables."
Según informa el gabinete de comunicación de Sybilla la diseñadora se ha enterado del premio en pleno vuelo a otro país. Ahora sí, a Sybilla nada le corta las alas.