Una de las cosas que más intriga a los papás cuando están esperando tener un bebé, es saber exactamente el color de sus ojos. Y es que es inevitable que durante 9 meses de embarazo sin poder saber con detalle cómo será tu hijo, no te hagas estas preguntas y probablemente algunas más.
Siento decirte, que tendrás que esperar incluso tiempo después de haber dado a luz, para saber el tono concreto de los ojos de la criatura, pero eso te lo cuento más abajo. Primero vamos a ponernos en situación y entender los factores que determinan o no, la genética de una persona. ¡Hablemos de ciencia!
¿De qué depende el color de ojos de un bebé?
Seguro que te suenan los términos "dominante" y "recesivo". Pues bien, los genes recesivos que se atribuyen a colores claros, por norma general, se encuentran en desventaja con los dominantes que vienen siendo los tonos marrones. Esto quiere decir que, si el padre tiene los ojos marrones y la madre verde, lo más probable es que el niño salga con el iris de color marrón.
No obstante, en muchas ocasiones los recesivos pueden sobrevivir y heredarse, ya que las mujeres poseemos dos cromosomas X. De ahí que en ocasiones los niños aparecen con colores claros sin que ninguno de sus padres tenga estos rasgos.
¿Esto siempre es así? La respuesta es, no.
La genética es muy caprichosa, no hay reglas precisas, así que siempre que hablemos de ella nos apoyaremos en probabilidades basadas simplemente en estadísticas generales.
¿Qué genes determinan el color?
La información genética que transmiten los padres y los abuelos se difunde gracias a los cromosomas 15 y 19. La línea de herencia no es muy clara en estos temas, dependiendo de la cantidad y el tipo de pigmentos situados en el iris de nuestros antepasados podrán transmitirse colores puros o mixtos.
Para un color puro, es necesario que los genes sean todos iguales, de lo contrario aparecerá un color mixto en nuestra descendencia. Siempre solemos hablar de tres tipos de colores principales, marrón, verde o azul, pero la raza humana posee multitud de variaciones fenotípicas en el color de los ojos.
Colores en los ojos
Hay tantas posibilidades como pigmentos existen en los genes, estos son los más comunes:
- Castaños: para que se dé este color, tiene que haber al menos un alelo marrón puro en el cromosoma 15 y puede tener combinaciones en el 19. Están vinculados a un cabello oscuro, por lo que tu hijo también podría adoptar esta apariencia.
- Azules: ambos cromosomas contienen pigmentos azules. Este tipo de ojos contiene bajas cantidades de melanina, por lo que son más sensibles a la luz solar.
- Verdes: suele producirse cuando existe una mezcla de melanina en los padres. El cromosoma 15 contiene pigmentos azules y marrones y el 19 puede tener cualquier combinación, pero siempre con un alelo verde.
- Miel o avellana: este color suele ser mixto ya que contiene elementos de ojos verdes, grises y marrones claros y en el borde, bien definido una tonalidad verde.
- Grises: surge por cantidades menores de melanina que en los otros tipos. Suele atribuirse a personas albinas.
- Rojos: es muy difícil que se dé este caso ya que se atribuye a pequeñas cantidades de melanina y también están relacionados con el albinismo.
- Violeta: relacionado también con casos de albinismo, donde se han combinado iluminaciones rojas y azules. No hace falta decir que este es un caso muy pero que muy poco probable.
- Negros: no hace falta que te diga que es poco frecuente que tu bebé salga con los ojos de este color. Realmente se trata de una anomalía llamada aniridia que se produce por la ausencia del iris.
Cuándo se define el color de ojos de un bebé
Es muy probable que tu bebé nazca con un color de ojos distinto al que tendrá toda su vida. Así que no te hagas ilusiones si tiene el color azul cielo que tú querías que tuviera. Es más, puede que tarde entre 6 y 12 meses en tener el tono definitivo que le acompañará durante toda su vida. Se han dado casos en los que el cambio de color de ojos del bebé no se ha dado hasta los 2 años o incluso se han producido alteraciones en la edad adulta.
¿Por qué pasa esto?
Otra vez entra en juego la ciencia.
Al igual que le pasa al pelo o a la piel, los recién nacidos tienen sus células productoras de melanina todavía inmaduras, esta va fabricándose poco a poco y por consecuencia va dándole el color a los ojos a medida que este va creciendo y las células maduran. Lo más común es que tu hijo venga al mundo con un color grisáceo indefinido porque no se ha establecido aún la melanina en su iris o que por su nula exposición a la luz solar, no se ha oscurecido todavía. Pero si tu bebé ha nacido con los ojos oscuros o marrones, olvídate de que por arte de magia se le pongan azules. Como he mencionado antes, los colores marrones son los que predominan.
Los meses posteriores al parto, observaremos la evolución del color de ojos del bebé, empezando a definirse definitivamente a partir del quinto. Esto es debido, no solo a la fabricación de melanina del bebé, si no también por la luz solar. Se piensa que la exposición, activa la producción de la melanina del iris, pero no debes acelerar este proceso para ver resultados inmediatos. Piensa que tu hijo aún no tiene suficientes pigmentos, y estos son los responsables de absorber y proteger de los rayos solares, así que durante los primeros meses deberás protegerlo del sol.
Un mito sobre el color de ojos
Os voy a hablar sobre el mito del color de ojos del lactante. Seguro que tu abuela te ha dicho: "Cuando dejes de dar el pecho a tu bebé se le definirá el color de sus ojos". No podemos apoyar esta teoría ya que no tiene ningún fundamento científico, el color de ojos se define por la herencia genética, no por el tipo de alimentación.