Si eres aficionado a la numismática, ya sabes lo importante que es conservar las monedas en buen estado. Una moneda deteriorada puede suponer que ésta pierda valor y el paso del tiempo hace que las monedas adquieran acumulación de bacterias, suciedad, óxido, etc., que muchas personas quieren eliminar.
Mantener las monedas limpias es un proceso que debe realizarse de forma muy, muy cuidadosa, ya sea aplicando métodos caseros o productos industriales. Esto es debido a que es fácil cometer un error y estropear la moneda, especialmente si son monedas antiguas, de hecho, en muchas ocasiones cuando la moneda es muy antigua, por extraño que pueda parecer, lo más recomendable es no limpiarla.
¿Cuándo limpiar una moneda?
Si se trata de monedas muy antiguas, que tienen "pátina" es recomendable no limpiarlas bajo ningún concepto, ya que la pátina les da valor.
La pátina es una capa protectora que se genera sobre las monedas de metal como las de bronce, cobre o plata, que toma colores verdosos, marrones o ligeramente morados dependiendo del metal y se forma debido a la corrosión que se genera a lo largo del tiempo.
Como decíamos, si tus monedas tienen pátina lo mejor es no limpiarlas, los coleccionistas valoran mucho aquellas monedas por las que se nota que han pasado los años y que tienen aspecto de ser antiguas, de hecho, hay muchos coleccionistas que no compran monedas en las que es evidente que se han realizado limpiezas.
Por otro lado, hay otros motivos por los que debemos pensar si limpiar las monedas o no. Por ejemplo, es posible que las rayemos o que los productos que apliquemos desgasten el propio metal de la moneda. Sin embargo, si la moneda simplemente tiene suicidad derivada de la manipulación de la misma y esta suciedad no está muy pegada, entonces sí es recomendable limpiarlas.
Limpia las monedas con agua y jabón
Quienes deciden limpiar las monedas suelen emplear simplemente agua y jabón, ya que es un método poco abrasivo y es una forma fácil de limpiarlas:
- Llena un balde con agua caliente y añade un poco de jabón de limpiar los platos.
- Remueve el agua de forma que se mezcle bien con el jabón.
- Introduce en el balde las monedas sin que queden amontonadas unas encima de otras.
- Espera entre media hora y cuarenta minutos.
- Saca las monedas del balde una a una y retira el resto de suciedad y de humedad con un algodón o con papel de cocina absorbente. Nota: en el caso de monedas de plata o de oro puede ser una buena idea utilizar un cepillo de dientes viejo para frotarlas y retirar todos los restos de suciedad que queden. Si no estas seguro/a de que el material de la moneda sea de oro, te mostramos unos trucos para aprender a identificarlo.
- Si aún no han quedado lo suficientemente limpias repite el proceso una vez más.
Limpia las monedas con alcohol y sal
Este método puede dejar las monedas muy limpias, es sorprendente cómo la sal y el alcohol actúan sobre el metal limpiándolo. Sigue los siguientes pasos:
- Echa en un balde 3 cucharadas de sal y un vaso y medio de alcohol.
- Utiliza un utensilio para remover el alcohol de forma que se diluya la sal lo máximo posible.
- Sumerge en la mezcla de alcohol y sal las monedas que quieras limpiar.
- Si las monedas están muy sucias déjalas varios días a remojo, con cinco o seis días puede ser suficiente. Si están poco sucias con un día puede ser suficiente.
- Aclara tus monedas, preferiblemente con agua destilada, ya que ayudará a que no quede ningún resto de la mezcla en la que estuvieron sumergidas y además no contiene cloro, con lo cual será mucho más efectivo su uso.
- Seca bien tus monedas con un algodón o con papel absorbente de cocina.
Limpia las monedas con vinagre
El vinagre es excelente complemento en la limpieza, y en el caso de la limpieza de las monedas también nos puede ayudar mucho, ya que sirve para quitar el óxido:
- Abre el grifo de agua fría y sin frotar las monedas deja que la presión del agua se lleve restos de polvo y suciedad.
- Echa en un balde vinagre y agua caliente a partes iguales.
- Introduce en el balde las monedas.
- Espera media hora.
- Saca las monedas del balde y aclaras con agua fría.
- Utiliza un algodón o papel de cocina absorbente para secar las monedas.
Consejos generales para limpiar monedas
- No limpies aquellas monedas que pueden tener valor para los coleccionistas.
- No utilices cualquier producto para limpiar monedas, si decides usar un producto de limpieza de los que no hemos recomendado aquí, adquiérelo en una tienda de numismática.
- Ten cuidado de no frotar la moneda con materiales que puedan rayarlas, es preferible que uses papel de cocina absorbente, algodón o que las dejes secar al aire siempre que las hayas aclarado con agua destilada, libre de cloro.
- Si decides cepillar la moneda, hazlo suavemente.
- Ten cuidado con los golpes, cuando manipules una moneda pon debajo una toalla de forma que, si se cae la moneda, ésta no se dañe.
Consejos sobre cómo conservar las monedas
Una vez tengas las monedas limpias, debes tratar de conservarlas lo mejor posible para evitar tener que volver a limpiarlas, o para hacerlo las menos veces posible. Para conservar tus monedas en buen estado haz caso de estos consejos:
- Acude a una tienda de numismática y compra algo que te permita guardar las monedas de forma ordenada. Normalmente los accesorios de numismática están fabricados con materiales adecuados para que la conservación de las monedas sea óptima. Las monedas estarán protegidas ante golpes y además podrás clasificarlas. Hay varias opciones: álbumes, fundas de plástico, cartones, bandejas, etc.
- Guarda tus monedas en un lugar libre de humedad. A veces llevarlas a los trasteros suele ser una mala idea ya que suelen ser sitios donde hay mucha humedad y la humedad deteriorar el metal con el que están fabricadas las monedas. Lo mejor es conservarlas en un lugar seco.
- Lacas: en el caso de que tengas monedas nuevas, el uso de lacas pueden ayudarte a conservarlas durante muchos años, ya que las protegen de la oxidación.