Con la llegada del verano a España, llegan también las salidas a la piscina o a la playa, tomamos mucho el sol, nos relajamos y vamos todo el día en bañador, una prenda de ropa que nos encanta. Vamos cómodos y frescos que es, al fin y al cabo, lo que buscamos en estos meses tan calurosos del año.
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Sin embargo, y pese a que podamos tener varios bañadores o bikinis en casa, estos se estropean muchísimo, por lo que es necesario cuidarlos si queremos lucirlos mucho tiempo como si fueran nuevos.
Consejos para lavar los bañadores sin estropearlos
Los bañadores son prendas de ropa que se deben lavar cada vez que se usan, ya que el cloro, el sol y la sal de la playa debilitan rápidamente su composición. Por ello, es necesario hacerlo con cuidado y tener en cuenta ciertos aspectos para que nos duren más.
Quitar la arena antes de lavarlos
Si somos de los que van a la playa más que a la piscina, lo primero que debemos hacer para lavar nuestros bañadores o bikinis es eliminar los granos de tierra que se quedan pegados en ellos. Para eso, solo será necesario poner la prenda en remojo con agua fría durante unos minutos y darle un par de vueltas para que la arena se desprenda.
Lavar siempre después de usar y antes de que se seque
Los bañadores y los bikinis se deben lavar después de cada uso y no como sucede con otras prendas, cada dos días o similar. Sin embargo, el lavado debe ser muy suave y, lo mejor es hacerlo de forma manual.
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Para ello, será suficiente con poner agua templada en un barreño con un poco de jabón neutro. Luego, lo movemos un poco y lo frotamos suavemente para quitarle la sal o el cloro que han quedado en el tejido. Es aconsejable no frotarlo demasiado, pues de lo contrario, las fibras se estropearán y el bañador se verá viejo muy rápido. Por otro lado, si queremos usar la lavadora para lavar estas prendas, lo recomendable es hacerlo usando también un jabón neutro y con un programa de ropa delicada.
También es aconsejable lavarlo dentro de una de las bolsas para ropa especial. No es necesario añadir suavizante; al contrario, se debe evitar a toda costa, pues este daña mucho las fibras del tejido.
Escurrir un bañador, tan innecesario como dañino
Muchas son las personas que le dan vueltas a los bañadores o bikinis para sacar el exceso de agua. Esto es algo que se debe evitar tanto como sea posible, pues lo único que conseguimos con ello es que estos cojan malas formas y luego no queden bonitos.
Nunca se debe secar un bañador al sol
Secar un bañador al sol no es una buena idea y es que, por mucho que estén hechos para soportarlo, el sol acaba por tener un impacto negativo en los tejidos. Si lo pensamos bien, estas prendas se pasan casi todo el día al sol, por lo que cuando las tendamos, será mejor darles un descanso. Para ello, podemos tenderlos a la sombra y durante la noche. Además, debemos recordar que son prendas que se han fabricado con materiales que se secan rápido, por lo que no es necesario exponerlos a la luz del sol durante mucho tiempo.
Igualmente, para que el color del bañador no se destiña, es importante ponerlos a secar con el estampado en el interior. De este modo, el color se mantendrá mucho más tiempo.
También debemos evitar colgar el bañador con pinzas para la ropa, pues estas dejarán marcas en los tejidos que harán que se vean deslucidos en poco tiempo.
Planchar los bañadores, nunca
Los bañadores o los bikinis no se deben planchar. Los tejidos con los que se fabrican son especiales y se estropearán rápidamente si los planchamos.
Manchas de crema solar
Las cremas solares que usamos para protegernos del sol acaban manchando el bañador, por lo que es necesario eliminarlas cada vez que lavemos el bañador o el bikini. Para quitar las manchas de la crema solar solo debemos poner un poco de jabón neutro justo encima de ellas y frotarlo un poco y muy suavemente. Luego, debemos aclarar y lavar como ya hemos indicado. También podemos quitar estas manchas frotando un paño húmedo con un poco de vinagre blanco.
Alternar los bañadores o bikinis
Para que nuestros bañadores duren más, también es una buena idea irlos alternando. De este modo, no los sometemos al sol a diario, por lo que no necesitaran de tantos lavados. Tener un par o tres de ellos, nos permitirá lucir uno diferente cada día a la vez que nos durarán mucho más tiempo.
Además, no es lo mismo que queramos ir a la playa a tomar el sol, por ejemplo, que ir a la piscina a nadar un buen rato. En el primero de los casos, seguro que este bikini que tanto nos gusta, es la elección ideal. Sin embargo, si queremos ir a nadar, los bikinis no son la prenda más cómoda, por lo que será necesario usar el bañador. Con él, estaremos de lo más cómodos, a la vez que podremos realizar todos los movimientos sin ningún tipo de limitación.
Pese a que cada año tenemos disponibles cientos de modelos nuevos de bañadores y bikinis para comprar, siempre tenemos nuestro bañador favorito. Por ello, es necesario cuidarlo mucho si queremos que nos dure más tiempo.