Las frutas aportan azúcares de origen natural y por tanto es una buena fuente de energía, y se recomienda consumirla a diario, así como hacer ejercicio físico. Te mostramos cómo conservar las fresas ya cortadas:
Fresas con vinagre
Aunque de entrada pueda echar un poco para atrás lo de echarle vinagre a las fresas, se trata de una de las elaboraciones más sencillas y deliciosas que se pueden hacer con este tipo de fruta.
Ingredientes (para 4 personas)
- 500 gramos de fresas
- 60 gramos de azúcar (4 cucharadas)
- 40 mililitros (aproximadamente) de vinagre
Pasos a seguir
- Quitar el pedúnculo (las hojas y la zona pálida de la parte superior) de las fresas.
- Lavarlas bien.
- Cortarlas en trocitos no muy pequeños. No se trata de una mermelada, hay que notar los trozos.
- Colocar las fresas en un recipiente y cubrir con el azúcar y el vinagre. Dejar reposar durante 5 minutos.
- Remover y dejar macerar durante al menos 1 hora. A mayor tiempo de maceración mayor integración de los sabores.
- Tras ese tiempo el vinagre y el azúcar se habrán convertido en un almíbar espeso.
Una opción para conservas de larga duración es envasarlas al vacío. Otra alternativa al vinagre puede ser el limón, pero éste tiene un punto de acidez distinto al del vinagre y, por tanto, el resultado difiere del anterior. La proporción correcta sería:
- 500 gramos de fresas
- 200 gramos de azúcar
- zumo de medio limón
Mermelada de fresa
Se trata de una elaboración muy sencilla y no te va a llevar mucho tiempo. La pectina es un componente natural de la fruta que ayuda a la preparación de mermeladas y confituras porque tiene propiedades espesantes. Pero no todas las frutas contienen la misma pectina y ésta va disminuyendo en el proceso de maduración de la fruta, así que en el caso de algunas frutas hay que añadir pectina para conseguir una mermelada espesa.
Puedes comprar pectina química o usar manzanas poco maduras para obtener pectina natural, mediante un procedimiento muy sencillo que consiste en hervir las manzanas durante 40 minutos a fuego bajo y reservar el líquido resultante colado. Ese líquido será la pectina que puedes añadir a tus mermeladas, en una proporción de aproximadamente dos cucharadas por kilo de fruta. Una vez conseguida la pectina, podéis iniciar el proceso de elaboración de la mermelada:
Ingredientes
- 1 kilo de fresas maduras
- 500 gramos de azúcar blanco o moreno (con azúcar moreno queda un color más bonito y un resultado más sano).
- Medio limón.
Pasos a seguir
- Retirar el pedúnculo de las fresas y, cortarlas por la mitad y lavarlas. Corta el medio limón en dos trozos.
- Ponerlas en una olla y cubrirlas con el azúcar. Añadir los dos trozos de limón y, si piensas usarla, la pectina.
- Encender el fuego y cocer la mezcla durante más o menos una hora, primero a fuego alto hasta que la olla se caliente y luego a fuego medio, removiendo de vez en cuando.
- Tienes que tener en cuenta que se va a compactar más al enfriarse.
- Tras sacar la olla del fuego, puedes triturar la mermelada con la batidora hasta que tenga la textura que más te guste, ya que eso es muy personal.
- Envasar al vacío para una mejor conservación.
En caso de que estéis siguiendo dietas donde no uséis azúcar, la receta se complica un poco, ya que carecerá del ingrediente que sirve de "pegamento". Por eso la receta sin azúcar incorpora pectina siempre y también requiere del añadido de unas hojas de gelatina que sirvan de aglutinante. Es muy importante, en este caso, usar algún tipo de edulcorante que soporte la cocción sin perder sabor, y no suelen ser baratos.
Conservar las fresas deshidratadas
El proceso de deshidratación se puede realizar de diversas maneras y permite disfrutar de tu fruta favorita en cualquier momento sin azúcares añadidos.
Para deshidratar fruta en casa lo más práctico, ecológico y natural es secarla al sol. Para ello necesitaréis solo la fruta y un cesto con rejilla en el fondo (os puede servir un tamiz) sobre la que colocar la fruta. El procedimiento es sencillo:
- Quitar el pedúnculo de las fresas. Lavarlas.
- Cortarlas por la mitad (se pueden dejar enteras si no son muy grandes)
- Colocarlas sobre la rejilla
- Poner los cestos de rejilla al sol y esperar.
El proceso de deshidratación natural puede tardar dos o tres días, y es recomendable hacerlo en zonas con una humedad ambiental que no supere el 60%. En caso de que tengáis más prisa, se puede usar el horno, o incluso adquirir un deshidratador, cuyo precio está entre los 50 y los 150€ para modelos de uso doméstico. Si usáis el horno, la temperatura no debe superar los 55 grados y debes darle vueltas a la fruta para que se seque uniformemente.
Fresas escarchadas
La fruta escarchada es un dulce que se conserva mucho tiempo y se suele usar en repostería. Pero su elaboración es bastante laboriosa.
Ingredientes
- 1 kilo de fresas
- 1 litro de agua
- 500 gramos de azúcar
Pasos a seguir
- Quitar el pedúnculo de las fresas y dejarlas en remojo durante 24 horas, cambiando el agua cada 8 horas.
- Escurrir las fresas y pincharlas con un tenedor para agujerearlas. Reservarlas.
- Preparar un almíbar ligero con el litro de agua y el azúcar. Cuando empiece a espesar, verterlo sobre las fresas, mezclar y dejar reposar 12 horas.
- Colar las fresas y llevar el líquido restante a ebullición. Verter nuevamente sobre la fruta y dejar reposar 12 horas más.
- Poner las fresas en el horno o 55 grados durante unos minutos.
- Espolvorear con azúcar y dejar enfriar.