El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano, además de ser unos de los de mayor tamaño. A diferencia de otros órganos, sus funciones son múltiples e incluyen procesos tan variados como purificar la sangre eliminando toxinas, facilitar la absorción de determinados nutrientes o fabricar bilis, una sustancia que sirve para facilitar la digestión de las grasas.
Dadas las condiciones de vida actuales, cuando el hígado se satura de toxinas por la ingestión de alcohol y medicamentos, así como por una alimentación inadecuada a base de productos ultra refinados, nuestra salud se resiente y es necesario tomar medidas para contribuir a la salud de este órgano. Purificar el hígado reduce el riesgo de enfermedades hepáticas y cáncer, eleva los niveles de enzimas antioxidantes y ofrece protección contra toxinas dañinas.
Consejos que debes tener en cuenta para mantener un hígado saludable
Son varios los consejos que puedes seguir para tener tu hígado en óptimas condiciones:
- Evita el exceso de bebidas alcohólicas. El consumo de alcohol es el principal factor de riesgo para el hígado.
- Si eres fumador, elimina el tabaco de tu vida con estas recomendaciones que te damos, el consumo de esta toxicidad puede alterar a la larga las células hepáticas.
- Aliméntate siguiendo una dieta saludable y haz ejercicio regularmente.
- Evita, en la medida de lo posible, los medicamentos que pueden dañar las células hepáticas. Si no puedes evitar su consumo, debes tratar de no tomar alcohol durante el tratamiento. Por ejemplo, un medicamento como el "acetaminofén" es un analgésico muy común pero especialmente perjudicial para el órgano.
- Algunos productos de limpieza,productos en aerosol e insecticidas contienen sustancias químicas que pueden dañar el hígado. Evita la exposición directa o la inhalación.
- Consume con moderación ciertos suplementos dietéticos. Determinadas sustancias naturales que aparentemente son inocuas pueden resultar perjudiciales cuando se consumen en cantidades masivas. Consulta siempre a tu médico al respecto.
- Hazte el análisis para la hepatitis vírica. Debido a que a menudo no presenta síntomas, puedes tener esta dolencia durante años y no saberlo. Si crees que has tenido contacto con el virus, lo más recomendable es que hables con tu médico para ver si necesitas realizar un análisis de sangre.
¿Qué alimentos ayudan a purificar el hígado?
Aunque el estilo de vida moderno presenta muchos riesgos para este órgano vital, la buena noticia es que hay una multitud de alimentos que ayudan a conservarlo, restaurarlo e incluso limpiarlo. Aquí vamos a mencionar sólo unos pocos:
- El ajo, que activa las enzimas hepáticas y favorece la eliminación de toxinas.
- Vegetales crucíferos como la coliflor y el brócoli, que no sólo son ricos en clorofila, sino que contienen "glucosinolato", un compuesto natural que produce enzimas capaces de eliminar toxinas y metales pesados.
- El té verde es conocido por sus múltiples propiedades curativas y el hígado no es una excepción, ya que contiene "catequina", un antioxidante polifenólico que favorece la función hepática.
- La "cúrcuma", una especie exótica que incrementa la producción de bilis, favoreciendo la digestión. Además, es rica en antioxidantes que tienen un efecto depurador.
- Los cítricos en general ayudan a eliminar agentes tóxicos, por ejemplo los pomelos, limas y limones, incluso consumidos en cantidades reducidas, ejercen un profundo efecto de limpieza en el entorno hepático.
Otros alimentos beneficiosos incluyen nueces, zanahorias, aguacates, remolachas y manzanas. Todos ellos contribuyen a mejorar nuestra salud en general pero, sobre todo, benefician directamente al hígado y la actividad digestiva.
Señales de que tu hígado necesita una desintoxicación
La contaminación, los pesticidas, los aditivos alimentarios, los productos químicos en nuestro cuidado de la piel y una gran cantidad de otros tóxicos de los que no somos conscientes encuentran su camino en nuestros cuerpos, día tras día. Pese a ser un órgano versátil y tener una legendaria capacidad regenerativa, hay ocasiones en que el hígado empieza a mostrar síntomas de que necesita un tratamiento:
- Fatiga excesiva
- Síndrome premenstrual o desequilibrio hormonal
- Gases e hinchazón del abdomen
- Alteraciones del sueño
- Alergias y alteraciones de la piel
- Problemas digestivos
- Cambios marcados de humor, confusión o problemas cognitivos
- Sudor excesivo y maloliente
Si tu hígado no está funcionando al máximo de su capacidad, es posible que esté experimentando uno o más de estos síntomas. En este caso es necesario un tratamiento específico para inducir al hígado a eliminar todas las grasas, depósitos de colesterol viejos, cálculos biliares, venenos, residuos de medicamentos y desechos tóxicos almacenados a lo largo de los años.
Proceso de desintoxicación rápido
Dada la amplia variedad de procesos en los que interviene el hígado, metabolizando nutrientes, regulando niveles de azúcar y eliminando residuos tóxicos, no es de extrañar encontrar abundantes referencias en internet de procesos de desintoxicación. La gran mayoría requiere seguir una dieta estricta que puede alargarse días e incluso semanas, lo cual suele ser un obstáculo para quienes tenemos una vida laboral o familiar ajetreada. Por suerte, hay tratamientos que podemos compatibilizar con nuestra rutina diaria y que no implican grandes sacrificios.
Uno de ellos es beber durante uno o dos días grandes cantidades de zumo de manzana orgánico. Junto a su efecto depurativo, la manzana es rica en ácido málico, que ablanda los cálculos biliares que suelen formarse en la vesícula. Para paliar el hambre, podemos completar la dieta ingiriendo cualquier tipo de fruta.
Otra receta muy popular es ingerir en ayunas el zumo de dos limones orgánicos, mezclados con agua y una cucharada de aceite. Repetir por la tarde y no tomar otra cosa durante el día que agua abundante o un caldo de verduras bajo en sal.
No podemos finalizar sin mencionar la importancia del potasio en cualquier proceso de desintoxicación hepática. El potasio es uno de los seis macrominerales, que ingerimos en cantidades importantes. Por desgracia, la dieta moderna es demasiado rica en sodio y altera el equilibrio entre estos dos minerales. Hay múltiples recetas de caldo rico en potasio, pero la base es siempre la patata, especialmente la piel, que es donde se concentra el potasio. Se combina con ajo, zanahorias, apio y otros vegetales que tienen un efecto depurativo y se consume a lo largo de un día.
Todos estos tratamientos puntuales deben completarse con un estilo de vida saludable y una dieta rica en frutas y vegetales.