El verano es para las bebidas frías, los vasos con hielo e incluso para la aberración de las cervezas recién sacadas del congelador. Las burbujas, los vinos blancos y los rosados también ganan protagonismo en el momento en que las temperaturas empiezan a subir pero, ¿qué pasa con los tintos cuando el sol despliega sus rayos? Que pueden ser igual de apetecibles. Sólo hay que saber elegirlos. 

Con la primavera encima y el verano a la vuelta de la esquina, te recomendamos los mejores vinos tintos para brindar al aire libre, sin miedo a lo que diga el termómetro. Tintos de verano que no querrás mezclar con casera.

Madreselvas en Flor, Thémera (D.O. Ribera del Duero)

Elaborado en pequeños depósitos de 12.000 kilos, a partir de uva tempranillo procedente de las mejores parcelas de Peñafiel (Valladolid), Madreselvas en Flor Tinto Joven 2018 es un Ribera del Duero que sobresale por su juventud y frescura.

Un tinto amable y con una larga explosión aromática, perfecto para tomar en primavera y en verano.

El nombre y la etiqueta son un guiño del enólogo Jorge González Granado, responsable del proyecto Thémera, al famoso tango de Carlos Gardel. Un vino que entra por la nariz como una gominola de fresa y frutos rojos, y en boca muestra toda su intensidad aromática dejando una sensación amplia y golosa. PVP: 5,95€

De Muerte, Bodegas Winery On (D.O. Yecla)

Además de una etiqueta tan llamativa que querrás guardarte de recuerdo, De Muerte es un vino de Yecla único en su especie. Está elaborado con monastrell y syrah, y es fruto de la pasión por el vino y el diseño de las Bodegas Winery On.

Un proyecto joven y dinámico que combina innovación y artesanía en todo el proceso de producción, desde el viñedo hasta la botella. Un vino de moda que seguro que ya has visto en más de un restaurante y que se agota con mirarlo. PVP: 9,95€

LAN D-12 2016 (D.O.Ca. Rioja)

Su nombre, D-12, hace referencia al depósito número 12, donde los bodegueros de LAN, Paco y Chuchi, reservaban sus vinos favoritos siguiendo la ancestral tradición de los viticultores riojanos de seleccionar su mejor depósito y reservarlo para consumo propio.

La décima edición de este vino corresponde a la añada de 2016 y hace buenas migas con carnes rojas y a la brasa, ahumados, platos especiados y quesos curados. Su color picota intenso da paso a aromas complejos en los que está presente la fruta roja y el regali

z característico de la uva tempranillo, con matices de cacao, violeta y fruta en licor. Un vino para tomar en cualquier época del año porque si algo lo define es su equilibrio en boca. Prueba a servirlo un poco más fresco de lo normal en tu próxima barbacoa en el jardín. PVP: 12,75€

Tr3smano Vendimia 2016 (D.O. Ribera de Duero)

A pesar de la intensidad de su tono rojo cereza, lo que sorprende de este tempranillo procedente de viejos viñedos de Olmedillo, Roa, La Horra, Moradillo, Pesquera y Peñafiel, y elaborado por Fernando Remirez de Ganuza y Pedro Aibar, es la frescura y los toques florales, que sobresalen sobre la fruta roja madura.

El roble nuevo añade complejidad con notas tostadas, ahumadas y especias, y hace que Tr3smano Vendimia sea un vino carnoso y fresco a la vez, con potencia pero elegante. Un tinto con carácter, ideal para carne roja, cuya finura puede acompañar igualmente platos más ligeros y típicos de esta época del año. PVP: 34,90€

Castelo Nouveau, Bodegas Castelo de Medina (D.O. Rueda)

Castelo Nouveau 2018 es el primer tinto monovarietal de Castelo de Medina. Un vino perfecto para esta primavera por su gran carga frutal, muy aromático y agradable en boca, que ha revolucionado tanto la bodega vallisoletana como la D.O. Rueda, famosa sobre todo por sus blancos de verdejo.

Castelo se atreve con este 100% tempranillo elaborado mediante semi-maceración carbónica, con el que busca, igual que la corriente artística que ha inspirado su nombre y su etiqueta (el Art Nouveau), romper con las tendencias del momento.

Un vino moderno, alegre, expresivo y fácil de beber, procedente de un viñedo situado sobre antiguas terrazas del río Duero, en una zona de grandes contrastes térmicos que favorecen el desarrollo de esta uva. PVP: 6€

Vijariego Negro, Bodegas El Sitio (D.O.P. Islas Canarias)

La filosofía de esta bodega tinerfeña consiste en respetar escrupulosamente el potencial enológico de cada variedad. Para ello, vinifican cada tipo de uva por separado, vendimiando en el momento justo de maduración y sin utilizar métodos agresivos.

Su malvasía aromática es una delicia para los amantes de los vinos blancos de carácter volcánico, pero su vijariego negro sorprende por una suavidad y un equilibrio poco habitual en los tintos canarios.

Una vendimia manual y una crianza sobre lías finas en barricas bordelesas de roble francés durante 8 meses, potencian la frescura del Vijariego Negro de El Sitio, un vino perfecto para acompañar pescados azules y carnes blancas a la brasa. PVP: 16€

Hito 2017, Bodega Cepa 21 (D.O. Ribera del Duero)

Dice José Moro, presidente de la bodega Cepa 21, que “Hito se hace mayor”. Y es que este vino, que presenta la frescura y el carácter frutal propios de un tinto joven, ha ganado en concentración e intensidad de aromas después de pasar ocho meses de crianza en barrica de roble francés.

La nueva añada sorprende con una personalidad muy marcada en la que las notas afrutadas de la tempranillo se ven completadas por los meses de crianza en madera, dando como resultado un vino redondo y fácil de beber pero con peso e intensidad. Un vino excelente para chatear que gustará por igual a enófilos y a amateurs. PVP: 10,70€

ARX 2016, Bodega Tesalia (I.G.P. Cádiz)

A punto de salir al mercado la nueva añada, ARX 2016 se encuentra en su mejor momento. El tinto ‘joven’ y rebelde de esta bodega de Arcos de la Frontera, fruto del amor por el sur de la familia Golding, es una mezcla diferente de syrah y tintilla de Rota, creada con un concepto similar en calidad y carácter al de su hermano mayor, Tesalia, aunque muy diferente en estilo. ARX destaca por la presencia de la fruta y por una frescura inusual en los tintos de Cádiz.

Es elegante, estructurado, con una acidez marcada y suaves taninos que llenan la boca de intensidad y dejan un recuerdo largo y agradable. Un vino nacido en las entrañas de la serranía de Cádiz, tocado por la brisa de dos mares y con un inconfundible toque británico. PVP: 17,90€