En el año 1993 abría sus puertas en Cenador de Amós en una impresionante casona del siglo XVIII de la localidad cántabra de Villaverde de Pontones. Tan solo dos años más tarde, la guía Michelín le otorgaba la primera de sus estrellas.
Dos décadas más tarde, los esfuerzos del chef de origen navarro Jesús Sánchez y su mujer Marián Martínez, compañera en el proyecto desde los orígenes se veían reconocidos con la llegada de la segunda estrella.
Y desde hoy, ya pueden celebrar la tercera estrella.
Jesús Sánchez, un chef en su mejor momento
Formado en la Escuela Superior de Hostelería de la Casa de Campo de Madrid, simultaneaba su formación en la misma con cursos impartidos por la Asociación de Pasteleros y Reposteros de Madrid.
Finalizados sus estudios en la capital comenzó un periplo que le llevó a trabajar en prestigiosos restaurantes de Madrid como la Taberna del Alabardero o el restaurante del hotel Ritz, a los que siguieron otros en París, Burdeos,..
En 1989 llega a Cantabria para trabajar en las cocinas de El Molino de Puente Arce y desde ese momento, la tierruca se convirtió en su tierra de adopción, pues Cantabria fue el lugar elegido para emprender su propio proyecto gastronómico.
Hoy en día, aparte de seguir al frente de el Cenador de Amós, dirige también el restaurante El Muelle del Centro Botín y colabora en multitud de espacios como asesor en materia de gastronomía y como ponente en diversos foros. También le hemos visto en programas de televisión como Masterchef, puede que ahora no caigas en quién es, pero seguro que le ubicas mejor si te decimos que es el chef que siempre lleva una gorra puesta.
Comer en el Cenador de Amós
Los platos de Jesús Sánchez son un homenaje al producto cántabro, que siempre están presentes en sus elaboraciones. Su objetivo es conseguir el disfrute máximo del comensal ofreciéndole una cocina honesta, basada en la tradición pero puesta al día, buscando sabores que no son desconocidos para el comensal pero en platos de alta cocina.
Todo ello en un entorno único, pues el Cenador de Amós es, con total seguridad, uno de los restaurantes más bonitos y románticos de todos los que tienen estrellas Michelín.
Los precios de los tres menús degustación oscilan entre los 90 y los 160 euros.