El restaurante de Rafa Soler tiene nombre de leyenda -en este caso cinematográfica-, y él ya ha escrito la suya propia en los libros de historia gastronómica al convertirse en el primer y único restaurante de Calpe en conseguir una Estrella Michelín. Un reconocimiento que bien merece un viajecito para comprobar si es cierto todo lo que dicen de él, ¿no? Pues allá que fuimos, para conocer en persona al chef y para degustar una a una sus creaciones: platos con los que rinde homenaje a su terreta, elaborados con ingredientes de la lonja y de la huerta local, siguiendo recetas mediterráneas con mucha tradición con las que presta atención a detalles como el aceite de oliva virgen extra o los vinos, un sobresaliente en etiquetas valencianas. Y todo sin salir del AR Diamante Beach Spa & Convention Centre, el multipremiado hotel en el que se encuentra alojado el restaurante.
Ficha y detalles del restaurante Audrey’s
- Audrey’s es el primero y el único restaurante -hasta la fecha- de Calpe en obtener una Estrella Michelín. Un restaurante gastronómico que destila los sabores valencianos en cada bocado, como un homenaje a la tierra del arroz, el mar y la huerta.
- Lo mejor: su menú Audrey’s maridado con los vinos de su bodega, seleccionados por el sumiller César Hernández, con un precio realmente moderado.
- Dirección: Avenida Juan Carlos I, 48, en Calpe. Alicante. Es el restaurante del hotel AR Diamante Beach Spa & Convention Centre.
- Horario: De martes a domingo de 13 a 15h y de 20.30 a 23h.
- Reservas: En el teléfono 608 667 637
- Precio: Menús degustación 59€. Con maridaje, 99€. Precio medio carta, 45€ (sin maridaje)
- Nota: 4,5
En el restaurante Audrey’s se come y se cena con diamantes
Emulando el título de una de las películas más célebres que protagonizara la actriz Audrey Hepburn -de quien toma prestado el nombre-, el restaurante de Rafa Soler es perfecto para una comida o una cena con diamantes. Y no me refiero a los que se miden por kilates, sino por kilos, que es como se debe medir la esencia de la cocina mediterránea. La cocina de Soler es puro sabor, del que te lleva de paseo por Villajoyosa con el primer sorbito de vermú -elaborado con uva autóctona monastrell y garnacha- y continúa por Benifallim con los aceites monovarietales de los que presumen justo antes de comenzar del desfile gastronómico.
Del Mediterráneo toma prestada la gamba roja, el hinojo marino, la salicornia, la sepia, la caballa, el salmonete de roca o el Peix de Calp, un habitual en su cocina. Y de la huerta levantina, el garrofón, los tomates o las habitas. Y no se olvida del arroz, procedente del humedal valenciano. Pero hay más, porque Soler se inspira no solo en lo que tiene al lado, sino en lo que guarda en su memoria. Hijo de panaderos, presume de panes de masa madre, horneado diariamente para él en Jalón, una localidad próxima al restaurante pero que, al estar en el interior, permite que el pan se elabore con menos humedad que en Calpe. Está todo pensado. Como la mantequilla de algas ichibi, wakame y codium que sirven previa a los aperitivos, toda una delicia de intensísimo sabor a mar.
Plato a plato de su menú gastronómico
Un menú gastronómico dividido en diez pasos que arranca fuerte: con un triple de snacks que te mete de lleno en el universo de la cocina valenciana de Soler, con un Caldo de Bernia con reducción de ternera, Huevo y patata en emulsión, y un bocado de Berberechos y capellán. El preludio de unos primeros platos que continúan con un Cremoso de erizo con caldo de sardinas y ñoqui de queso, y unas Cocochas de bacalao con sopa de ajo y chirivía. Propuesta que, si no fuera por el siguiente plato, el Guiso de anguila y habitas, le daríamos el primer premio en nuestro ranking.
Llega el momento de los pescados y nos sorprende con una Corvina salvaje con apio-bola y tirabeques, y entre las carnes, con unas Castañuelas ibéricas con setas de temporada y boniato a las que es imposible negarse. Eso sí, nos quedamos con ganas de probar los arroces en los que Soler es todo un maestro, pero está justificado: la noche es buena compañera para tomar guisos con arroz. Así que ya tenemos la excusa perfecta para volver a hacer una visita a Audrey’s. No nos olvidemos los postres: un volcán de chocolate, helado de avellana y bizcocho de caramelo que se derrite en la boca.
Bodega de esencia local
Y los vinos -¡ay qué vinos!- perfectamente armonizados en cada plato con la maestría de un sumiller como César Hernández. Para la ocasión ha elegido vinos con muchas peculiaridades locales, seleccionado entre etiquetas de autor como las de la Bodega Vinessens, una pequeña empresa familiar que cultiva viñas viejas e incluso centenarias, hasta otros elaborados con uvas autóctonas, como la Merseguera, la Malvasía o la Monastrell. Hernández es capaz incluso de llevarnos hasta Mojente, la zona conocida como la Toscana valenciana, con un Cullerot, un blanco elaborado en tinaja de barro por la bodega Celler de Roure.
Un maestro cocinado entre maestros
Lo de Rafa es fama merecida. Y ganada a pulso tras pasar por los fogones de algunos de los mejores. Se formó con Martín Berasategui en Lasarte, trabajó a las órdenes de Fermi Puig en Drolma y asimiló el refinamiento de la Nouvelle Cuisine en L´Atelier de Joël Robuchon en París. Todo junto, después de años de experiencia y formación, ha desarrollado una técnica absolutamente depurada con toque cosmopolita y actual, sí, pero con un respeto absoluto a sus raíces, su tradición y su producto, siempre de temporada y procedente de la rica despensa local.
Y la recompensa a tanto esfuerzo se ha hecho esperar, pero ha llegado. Fue nombrado Mejor Cocinero Revelación de la región en 2011, además de quedar segundo en el ranking de Cocinero Revelación de España ese mismo año; después, su restaurante fue elegido el Mejor restaurante de lujo hotel de Europa en los World Restaurant Awards de 2017. Y como colofón, la tan ansiada Estrella Michelín, la primera -y -única hasta la fecha- que ha obtenido un restaurante de Calpe y que ha posicionado la ciudad como un destino gastronómico nacional.
Sala sencilla y (casi) con vistas al mar
Lo curioso de Audrey’s es su ubicación, dentro del multipremiado Hotel AR Diamante Beach Spa & Convention Centre. Tiene puerta propia de entrada y acceso directo desde el inmenso hall principal del hotel. De hecho, se encuentra en la entreplanta, con vistas al hall y, de fondo, el peñón de Calpe, situado a tan solo unos metros desde el hotel. La atmósfera que se respira es de casi intimidad, sobre todo en las cenas, momento en el que la luz se hace más tenue y el silencio reina en la sala. Todo muy protocolario y elegante, pero a la vez informal. O dicho de otro modo: no se exige etiqueta, pero no están bien vistas las chanclas playeras, por muy destino de ‘sol y playa’ que sea, aquí la formalidad es bienvenida.