Semana a semana, receta tras receta, siempre intento recalcar la importancia de consumir productos de temporada y lo más naturales posible. Alimentos frescos y de cercanía que, además de ayudar a los pequeños productores y tenderos, nos ayudan a llevar una dieta sana y equilibrada. Una de las muchas verduras que están en pleno apogeo son las coles y, en particular, la coliflor.

Muchas veces, a la hora de prepararla, en España siempre tendemos a hacerla con bechamel, hervida o, en ocasiones contadas, rebozada. Pero sin duda alguna, hay un mundo de coliflor enorme ahí fuera. Ha sido una verdura maltratada y que ha causado muchos traumas entre los más jóvenes ¡Qué sensación era aquella de llegar hambriento del colegio y, ya en la escalera, empezar a oler ese aroma tan peculiar y, para muchos, muy desagradable! Porque la sobrecocían. Eso ha llegado hasta hoy.

Se trata de un producto con unas propiedades nutricionales envidiables y merece una pequeña oportunidad. Hace poco publicamos una colirroz tres delicias, que servía para seguir adelante con nuestra súper dieta que estamos llevando a cabo para quitarnos los excesos navideños y, a la vez, para aprovechar los restos de verduras que tuviéramos en la nevera. Pero también hay la posibilidad de hacer una sorprendente Coliflor Wellington o asarla entera y acompañarla con mojo, que queda deliciosa. Y luego está también la receta de hoy, unos medallones de coliflor cocidos al vapor y terminados dentro de una salsa de puerro (usando el verde también) con unos guisantes frescos también cocinados lo justo al vapor.

Los guisantes son otra de esas verduras que empiezan a llegar a nuestros mercados. Acostumbrados a las típicas bolsas congeladas que se pueden conseguir en todos lados, cuando se tiene la ocasión de probar unos buenos guisantes frescos, ya no hay vuelta atrás. Un sabor dulce, blando y muy delicado que combina a la perfección con cualquier receta. En esta ocasión realzarán un plato vegetariano de coliflor en salsa, pero pocas cosas hay mejor que, por ejemplo, unos guisantes con jamón y huevo frito. ¡Ah! Muy importante. Cocinar poco los guisantes y reservar las vainas para hacer un caldito delicioso.

Cómo hacer coliflor en salsa de puerros

Paso 1

Con mucha paciencia sacar los guisantes de las vainas y reservarlos. Guardar también las vainas porque con ellas podríamos hacer un caldo o incluso una crema deliciosa.

Paso 2

Limpiar muy bien el puerro debajo del chorro del agua para eliminar cualquier posible resto de tierra. Quitar también la base que tiene las raíces. Pelar la capa más superficial. Cortar el puerro en medallones y a la mitad, de manera irregular, y añadirlo a una sartén con aceite a fuego medio/bajo. Echar una pizca de sal y cocinar durante 10 minutos hasta que esté pochado y bien tierno. 

Paso 3

Mientras se pocha el puerro, cocinar los guisantes al vapor durante 2 minutos, tapados y sobre un colador en una olla con agua hirviendo. Por otro lado, cortar la coliflor en medallones gruesos de 1.5 cm aproximadamente, retirar el pedúnculo más recio y cocer también al vapor durante 15 minutos, hasta que esté lo suficientemente tierna como para pincharla con un cuchillo pero no excesivamente blanda. 

Paso 4

Cuando el puerro se haya pochado, incorporar la harina y remover bien con unas varillas para que se cocine durante un par de minutos. Añadir entonces un chorrito de brandy y esperar que evapore el alcohol ligeramente. Agregar entonces el caldo de verduras caliente y dejar que reduzca y coja consistencia. Mezclando constantemente a fuego medio. 

Paso 5

Triturar bien la salsa y rectificar de sal y pimienta, añadir un poco más de caldo si fuese necesario una vez triturado todo. Tendremos que cocinar ligeramente el conjunto y seguirá espesando, hay que tenerlo en cuenta.

Paso 6

Devolver la salsa a una sartén e incorporar la coliflor y los guisantes. Servir caliente.