Hoy en día rara es la persona en España que no ha probado o, al menos, oído hablar del falafel. Un plato que siempre lleva el apellido “de garbanzos”. No obstante, poca gente sabe, en cambio, que se trata de una de las recetas más antiguas de la humanidad y que, en su origen (El Antiguo Egipto), se elaboraba con la legumbre más típica del país: habas. Sí, queda poco tiempo para entrar en su temporada y, hoy en día, es una de las verduras favoritas de España. Pueden encontrarse frescas, congeladas o en conserva, pero lo que está claro es que, sea cual fuere la forma de preparación, están deliciosas.

Hoy en día está muy de moda el edamame típico japonés y, para dejar constancia del excelente producto del país, nuestras habas no tienen nada que envidiarle. En nuestro país se suelen consumir con alcachofas, con setas y huevo o salteadas y con jamón, pero en esta ocasión vamos a hacer un falafel de habitas tal y como lo hacían los antiguos egipcios.

El falafel es un entrante que no falta en los restaurantes de cocina árabe, se puede comer uno muy rico por ejemplo en Barganzo, Fayer o en La Falafería y es que aunque es un plato tremendamente sencillo y rápido de hacer muchas veces sufre de ser resultar seco y pastoso. En realidad basta con triturar muy bien todos los ingredientes (con garbanzos o habas crudos, ojo), añadir las especias al gusto, hacer bolitas y freírlas en abundante aceite caliente. El secreto reside claramente en el equilibrio de los ingredientes.  

Se preparan exactamente igual que si fueran garbanzos y, además, pueden acompañarse de una buena salsa de yogur o ese pan de pita que hicimos en apenas 10 minutos. Las habas son un súper alimento que ha dado y da de comer durante muchísimos años, principalmente, porque es muy bajo en calorías y muy rico en nutrientes.

Como acompañamiento, el falafel se suele servir con un poco de salsa de yogur estilo tzatziki, también con salsa tarator, con una salsa tahina de sésamo o una salsa de tomate picante. El falafel es muy típico también verlo como relleno de los kebabs vegetarianos, perfecto para sustituir la carne. 

Cómo hacer falafel de habas tiernas

Ingredientes

  • Habas frescas peladas, 100 g
  • Diente de ajo pequeño, 1 ud
  • Chalota, 1 ud
  • Comino, 1 cucharadita
  • Pimienta negra, 1 cucharadita
  • Sal, c/s
  • Tallos de cilantro con sus hojas, 5 ud
  • Tallos de perejil con sus hojas, 5 ud
  • Aceite de oliva para freír, abundante

Paso 1

Triturar todos los ignredientes de forma conjunta

Paso 2

Formar las bolitas de falafel.

Paso 3

Freír en abundante aceite.

Paso 1

Pelar las habas y reservar las vainas (aunque en esta preparación no las vayamos a utilizar es conveniente reservarlas porque, cociéndolas con un poco de sal, pueden utilizarse para conseguir una salsita bien rica). Pelar la chalota y sacar el germen al ajo.

Paso 2

Introducir todos los ingredientes en un procesador de alimentos o en una batidora junto con la sal, el comino, el cilantro y el perejil. Triturar muy bien hasta que se consiga una masa homogénea y sólida. Si fuera necesario, se puede añadir una cucharadita de agua, pero con mucho cuidado porque si se humedece en exceso, puede fastidiarse la preparación. También podríamos incorporar una cucharada de harina de habas o garbanzo.

Paso 3

Formar bolas con la masa y aplanarlas muy ligeramente (esto al gusto de cada uno). De hecho, existe un utensilio que da forma al falafel de forma muy sencilla. 

Paso 4

Poner un cazo con abundante aceite de oliva suave a calentar. Freír el falafel cuando el aceite esté muy caliente. Retirar a papel absorbente y servir acompañado de vuestra salsa favorita o de un buen pan de pita.