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- Comensales: 4
Aloo Gobi es un tipo de curry vegetariano con patatas y coliflor. En algunas regiones, se acompaña de guisantes. El plato proviene tradicionalmente del subcontinente indio y sería el equivalente a un plato tan célebre y socorrido como la paella en nuestro país. ¿Quién dijo que cocinar platos indios era difícil? Os enseñamos cómo preparar este delicioso guiso de curry vegetariano.
Ingredientes
Para el guiso del curry vegetariano:
- Patata, 750 ml
- Caldo de verduras, 750 ml
- Coliflor troceada, sin el tallo, 250 g
- Guisantes congelados, 200 g
- Mantequilla, 10 g
- Jengibre troceado, 15 g
- Diente de ajo, 1
- 1/2 cebolla pelada y troceada
Para el condimento de curry:
- Cucharadas de pasta de tomate concentrado, 2
- Cucharada de cúrcuma en polvo
- Cucharada de comino molido
- Cucharada de ras al hanout
- Cucharadita de curry
- Semillas de clavo, 2
- Semillas de cardamomo, 2
- Cucharadita de sal
- Cucharadita de pimienta negra molida, 1/2
- Cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 2
- Cilantro fresco troceado al gusto
Cómo preparar curry vegetariano
1: Preparar ingredientes y cortar patatas
Picamos la cebolla y el ajo en brunoise. Rallamos el jengibre. Lavamos las patatas y la coliflor. Cortamos las patatas en trozos medianos y separamos las flores de la coliflor.
2: Sofreír y añadir caldo
Una vez tengamos todos los ingredientes para el curry vegetariano a disposición, calentamos en una olla o cazuela el aceite de oliva y la mantequilla. Si queréis que la receta sea vegana al 100%, solo tenéis que evitar este paso con la mantequilla o emplear vuestro sustituto favorito. Acto seguido, pochamos la cebolla a fuego medio. Tan pronto como coja color, añadimos el ajo y el jengibre. Lo vamos removiendo durante 5 minutos. A continuación, añadimos el tomate concentrado y dejamos sofreir un par de minutos. Agregamos las patatas y la coliflor. Le damos otro meneo.
Momento para echar todas las especias: la cúrcuma, el comino, el ras al hanout, el curry, el clavo, el cardamomo, la sal y la pimienta. Podéis añadir también una cucharadita de garam masala, puesto que la receta original suele llevar. Una vez esté todo vertido, agregamos el caldo. Volvemos a remover y tapamos. Cuando el caldo empiece a hervir, bajamos el fuego a temperatura media y dejamos cocer durante 15 minutos. Una vez pasado este tiempo, incorporamos los guisantes y dejamos guisar otros 10 minutos más.
3: Servir
Apartamos la olla y dejamos reposar unos minutos. Casi todos los platos de cuchara cogen mejor el sabor si los dejas reposar después de apagar el fuego. Probamos y rectificamos de sal si es necesario. Nosotros le hemos añadido un poco de cilantro picado. También, podríamos echarle un poco de perejil fresco picado por encima. Si tenéis la oportunidad de acompañarlo de pan naan indio, no olvidaréis esta receta.
Notas
Hace tiempo, unos amigos irlandeses nos contaron sobre su íntima amistad con una familia tradicional india, afincada en Belfast. Nos relataban que, cuando les invitaban a comer a su casa, la familia disponía de una despensa entera únicamente reservada para atesorar botes y botes de condimentos misteriosos. La cocina india es un universo por explorar. Lo que hoy conocemos de sus propiedades es una rica fusión entre la presencia colona y la milenaria tradición de innumerables culturas locales.
A la hora de preparar un plato indio en España, podemos encontrar dificultades para acceder a condimentos muy específicos. Por eso, ya sabéis que nos gusta adaptar muchos platos para que consigáis los ingredientes fácilmente, sea en un mercado de abastos o en vuestro supermercado favorito. Los sabores que conseguimos con esta personalización remiten a muchos otros platos indios, ya que el curry, la cúrcuma, el cilantro y el jengibre son el alma de sus platos más célebres.
Por otra parte, el añadido de ras el hanout conduce los sentidos a la cercana gastronomía marroquí. En conjunto, este curry vegetariano de patatas, coliflor y guisantes al estilo Aloo Gobi deja un sabor muy penetrante que redondea la textura y la carne de la patata y la coliflor. Nuestro consejo siempre es el mismo: emplead si podéis un caldo casero, mimad la base del sofrito y disfrutad de un guiso tan fácil. Para que luego digan que los guisotes vegetarianos no están cargados de sabor y nutrientes.