No hay nada mejor que disfrutar de un buen postre, rico, fresquito para el verano y que además sea saludable… sí, como lo oyes, atrás quedaron esos remordimientos por comer tartas deliciosas pero con demasiadas calorías.

Hoy os propongo una receta muy sencilla sin azucares añadidos, sin lactosa ni gluten, y vegana, por lo que no contiene ningún ingrediente de procedencia animal ¿te animas a prepararla? Te aseguro el éxito y asombro entre tus comensales.

Preparación de la tarta de melocotón y té matcha

1: Preparar ingredientes

Para realizar la base debemos deshuesar y dejar en agua los dátiles la noche anterior, así se rehidratarán y adquirirán la consistencia adecuada para cuando preparemos la masa de la base. Pondremos los dátiles en un bote de cristal y añadimos agua hasta cubrirlos, cerramos y reservamos en el frigorífico.

2: Preparar la base de la tarta

Procesamos en un picahielos o maquina tipo Thermomix todos los ingredientes de la base durante 1-2 minutos. Importante reservar el agua en el que han estado los dátiles, ya que la emplearemos para rehidratar las semillas de chía 30 min mientras preparamos el resto de la receta.

Disponemos la masa de la base en un molde de dos piezas, forrando la base con papel vegetal. Nos ayudaremos con una espátula humedecida en agua para distribuirla con mayor facilidad (si te manejas mejor con las manos también puedes hacerlo aplicando un poco de agua en ellas para que no se te quede la masa pegada).

Dejamos reposar 30 min en la nevera para que adquiera la consistencia deseada. Si preferís una base crujiente también podéis hornearla 15 min a 180ºC, y le dará un toque muy especial por la caramelización de los azúcares de los dátiles.

3: Relleno de melocotón y chía

Para crear el gel de chía debemos añadir una cucharada y media de agua por cada una de semillas. Asi deberemos mezclar 3cdas del agua de hidratación de dátiles con las 2 cdas de chía. Agitamos bien y dejamos reposar 30min hasta que se forme nuestro pudding.

Con una batidora procesamos el melocotón maduro, junto con  300 ml de leche de coco, el sirope de ágave opcional y el gel formado por las semillas de chía. Vertemos un poco de esta mezcla en un cazo y llevamos a ebullición. Justo en ese momento añadimos el agar-agar en polvo y disolvemos con el fuego apagado (en caso de que emplees el agar-agar en formato de alga pura deberás rehidratarlas 30 min antes en agua, escurrirlas y disolver durante 20 min a fuego alto en la mezcla del cazo).

Una vez tengamos el agar-agar disuelto mezclamos ayudándonos de la batidora con el resto de la mezcla, vertemos sobre la base de avena, damos unos golpecitos para eliminar las burbujas de aire que hayan quedado en el interior y dejamos enfriar unos 20 min en el frigorífico.

4: Preparación de la cobertura

Mientras, preparamos la cobertura: calentamos los restantes 100 ml de leche de coco junto con el jugo y ralladura de limón (muy fina), sirope de agave, té matcha y por último el agar-agar. Dejamos que enfríe un poco antes de verter sobre la anterior capa dejando caer la mezcla de té sobre el dorso de una cuchara para evitar que estropee la capa de melocotón. Dejamos reposar un total de 2 horas más en el frigorífico antes de servir.

5: Servir la tarta de melocotón y té matcha

Al desmoldar la tarta debemos tener cuidado de no hacerlo demasiado deprisa ya que se puede cuartear y romper por el lado donde no se haya separado del todo. Mi truco es dejarla 15min a temperatura ambiente antes de pasar un cuchillo tipo “mantequilla” por los bordes y después separar la pieza que lo rodea.

Para la presentación podemos decorar nuestra tarta de melocotón con un poco de coco rallado o virutas de chocolate puro.

Notas

Una de las cosas a tener en cuenta es que la leche de coco no es lo mismo que el agua de coco. Pregunta en tu supermercado, suelen estar en formato de lata. También deberás agitar o remover bien la leche cuando  vayas a emplearla ya que tiende a separar sus fases grasa y acuosa cuando transcurre demasiado tiempo en reposo.

A cerca del té matcha, para este tipo de preparaciones culinarias en las que se va a  aplicar calor en el té, suelo emplear uno que sea especial para cocinar. No merece la pena emplear los de infusiones, más caros y de mejor calidad, ya que se va a perder gran cantidad de los antioxidantes y propiedades en el proceso.

Si no disponemos de algunos de estos ingredientes podemos versionarla sustituyendo la leche de coco por alguna otra leche vegetal tipo almendras o avena; también podemos cambiar los dátiles de la base por ciruelas pasas (realizando el mismo proceso de hidratación descrito); por ultimo podemos dar un toque muy especial cambiando el melocotón por mango, ya que ambos aportan un sabor y textura similar en estas preparaciones tipo “falsa cheesecake“.

Una vez leída y aprendida toda la teoría sobre cómo hacer esta tarta de melocotón solo queda el paso mas importante… ¡ponerse manos a la obra! espero que la disfrutéis y repitáis muchas veces.