A medida que avanzaba este “falso otoño” que hemos tenido en muchas zonas de España, realmente he estado anhelando comidas más cálidas y reconfortantes, cuencos de curry, sopas, cremas y guisos que me griten “estás en casa” después de un largo día de trabajo. Por eso hoy te traigo una receta de Curry Verde Thai Vegano, que además de sustancioso, está lleno de mucho sabor y puedes hacer grandes porciones con mucha facilidad, para que tengas “sobras” para esos días en los que estamos muy ocupados y para el tupper del trabajo 🙂

(*) Podemos sustituir la salsa Tamari por salsa de soja.

Preparación del curry verde thai vegano

01: Preparar la mise en place

Comencemos cortando la cebolla, el ajo, las hierbas, el maíz baby y los calabacines. También rallamos el limón, exprimimos el zumo y reservamos.

02: Sofreír ajo y cebolla

Ponemos la cebolla y el ajo en una sartén grande (o wok) a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva. Cocinamos durante 8-10 minutos o hasta que veamos que todo esté tierno.

03: Integrar la pasta de curry verde tailandés

Una vez que la cebolla y el ajo estén blanditos, incorporamos la cucharada de pasta de curry verde, lo mezclamos muy bien y lo cocinamos durante un par de minutos más para que se integren todos los sabores antes de agregar la leche de coco.

04: Añadir verduras y condimentos

Incorporamos la leche de coco y dejamos que hierva. Después agregamos la ralladura de limón, las hierbas aromáticas picadas, el jarabe de arce, el zumo de limón, la salsa tamari, el calabacín y el maíz baby. Reducimos la temperatura y dejamos cocinar a fuego lento durante 25-30 minutos.

05: Servir

Una vez que esté listo, cortamos en aros pequeños el chile rojo y servimos nuestro Curry Verde Thai Vegano. Acabamos el plato  espolvoreando por encima el chile, sal y pimienta al gusto.

Yo lo he servido el Curry Verde Thai Vegano con Cous Cous, pero también lo sirvo con arroz, quínoa o solo.

Notas:

Es otra de las ventajas de esta receta, que además de ser MUY fácil de preparar, también podemos adaptarla como queramos y cambiar las verduras por cualquier otra cosa que tengamos en la nevera, ¡o lo que nos guste más! Versatilidad es una de las palabras que podrían definir esta receta.

La comida –para mí- es amor, por lo tanto, también es emoción. ¿no me crees? En ese caso te digo que basta solo una cucharada de comida para que, con su aroma o sabor nuestros cuerpos se sumerjan en breves viajes emocionales y así, revivir muchos de los mejores recuerdos de nuestras vidas. Por ejemplo; cuando yo pruebo una crema casera de verduras automáticamente pienso en mi abuela, en mi infancia con ella y en las muchas horas que juntas invertíamos para cocinarle a toda la familia (unas 8 personas), por lo que nuestras comidas debían ser abundantes y –en su mayoría- de cuchara para que todos quedasen satisfechos. Es precisamente gracias a mi infancia que tengo un lazo emocional muy fuerte con la comida “en cuencos”, porque ninguna otra me hace sentir más “en casa” y en familia.

Además, confieso que tengo una relación muy personal con muchos de los ingredientes que he usado para preparar esta receta como, por ejemplo; el limón, las hierbas aromáticas y muy especialmente el chile. En casa teníamos una huerta maravillosa de donde podíamos obtener estos ingredientes frescos con solo salir al patio, por esta razón el simple aroma del limón o el cilantro me trae recuerdos maravillosos, me inspiran y son referencia obligada en mi cocina. ¡Nunca pueden faltar!

Sugerencia para los NO veganos

He hecho este curry vegano, pero ¡sorpresa, no soy vegana! Lo que sí soy es fan de comer lo más saludable posible y es por ello que a veces hago que las verduras sean las protagonistas de mis platos. La buena noticia para los amantes del curry y NO veganos, es que podemos añadir alguna proteína –como el pollo- a esta receta. ¿Recuerdas que dije que esta receta está pensada para guardar en la nevera y sacarnos de apuros? Pues bien, al día siguiente de preparar esta receta corté unas pechugas de pollo y lo cociné en una sartén pequeña, después le añadí 2 cucharadas soperas de este Curry, lo cociné todo junto unos 5min para que los sabores se intregaran con el pollo y lo serví con arroz. Amigos, así es como este Curry Verde Thai vegano, ¡ya NO es Vegano!

Me ha hecho muchísima ilusión poder compartir esta receta contigo y espero que además de alimentarte te reconforte el cuerpo –y el alma- en los días de frío y lluvia que están por venir.