Es falso porque es completamente vegano y no lleva atún ni nada que se le parezca, pero cuando lo untas en las tostadas o te preparas con el un sándwich estilo Rodilla. Aún así, a cualquiera le resultaría difícil negar que esta receta no lleva atún, sardinillas, caballa o algún otro pescado azul en conserva.

Y es que, en definitiva, este paté de atún vegano, sabe realmente a pescado.

(*) La veganesa podemos hacerla bien con una leche vegetal -con la de almendra queda riquísima- o bien podemos aprovechar el agua de las alubias o los garbanzos para hacer la veganesa de aquafava. Ambas recetas están en el blog y podéis encontrarlas en los enlaces que siguen, aunque lo más cómodo, para no tirar nada, es utilizar esta última.

Preparación del paté de atún vegano

1: Preparar los ingredientes y mezclar

Escurrimos las alubias o los garbanzos y los enjuagamos bien. Después los ponemos en un bol y los aplastamos bien con ayuda de un tenedor, no importa que quede algún tropezón, pues lo ideal es conseguir una textura que recuerde al atún desmigado. Aunque si lo preferís más fino, podéis dar un par de golpes de batidora.

Añadimos la cebolla y el pimiento del piquillo asado picados muy finos, así como el alga nori, que os recomiento trocear con unas tijeras en vez de con cuchillo sobre la tabla. Finalmente añadimos dos o tres cucharadas de la veganesa que hayamos elegido. Más o menos cantidad en función de si queremos una pasta más densa o si preferimos que sea más fácil de untar y que valga para dipear.

2: Reposar y servir

Aunque podemos tomar nuestro paté de atún vegano nada más prepararlo, el sabor marino será más intenso si lo tapamos con papel film y lo dejamos reposar en la nevera al menos media hora antes de servirlo, pues así daremos tiempo a que se hidrate el alga nori y se reparta mejor el sabor.

Resultado

Este paté vegano de atún también es apto para intolerantes a la lactosa y para celíacos. Es perfecto para seguir consumiendo legumbres en verano y es una alternativa al hummus, que suele ser el recurso al que más echamos mano cuando queremos comer legumbres en días de calor.

Incluso a los no veganos que tampoco tengáis problemas con el gluten o los lácteos, os recomiendo esta receta, ya que es perfecta para rellenar sándwiches tanto solo como acompañándola de otro tipo de ingredientes como lechuga, tomate, huevo, o incluso con verdadero atún al que potenciaréis su sabor.

Probad y me contáis.