¿Rebozados crujientes sin grasa? ¿Sin pasar por una sartén o freidora rebosante de aceite? ¿Es eso posible? Pues sí, ha sido cuestión de ir probando distintas ideas y en Cocinillas ya tenemos unas cuantas que funcionan bien, un par de ellas ya las conocéis, pero hoy las vamos a recordar y una nueva que os presento hoy para la que no hace falta ni usar el horno.
Y es que el horno da muy buenos resultados para hacer “fritos” sin aceite, pero en muchas ocasiones yo le veo dos problemas, uno, que es lento porque entre que esperas a que el horno se caliente y luego se hornee lo que sea, por mucho que no sea trabajo, implica esperar un tiempo del que no dispones cuando lo único que tienes prisa por hacerte la comida y dos, el gasto de energía que no compensa cuando lo único que pretendes es hacer la comida para uno solo.
Rebozados crujientes sin grasa en la sartén
Como os decía, cuando se trata de poca cantidad, una forma de conseguirlo sin tener que encender el horno, es hacerlo en la sartén en la que podemos conseguir unos rebozados crujientes sin grasa a base de “tostar” el rebozado en vez de freírlo. Para hacerlo así, a mí lo que mejor resultado me da es usar panko japonés en vez de nuestro habitual pan rallado, ya que su textura es mucho más ligera, se tuesta antes y queda mucho más crujiente.
En esta ocasión, para que veáis cómo se hace he rebozado un filete de fiambre de pechuga de pavo cortado en varitas para hacer unos fingers de pavo, pero también podemos hacerlo con otros alimentos como rodajas de calabacín, filetes de pollo muy finos -para que se cocinen bien por dentro-. Queda muy bien también si rebozamos pechuga de pollo cocida y fileteada.
Lo único que necesitamos es:
- Lo que sea que vayamos a rebozar
- Clara de huevo o huevo batido
- Sal
- Especias al gusto (opcionales)
- Panko
- Aceite para engrasar la sartén (1 cucharada sopera para una sartén de 18 cm de diámetro)
Y es tan simple como engrasar la sartén con el aceite y ponerla a calentar a fuego medio.
Batir la clara de huevo o el huevo entero con la sal y, si queremos, algunas especias.
Pasar lo que sea por el huevo batido, rebozarlo en el panko.
E ir tostándolo en la sartén a fuego medio -es importante que el fuego no sea demasiado fuerte para que se vaya tostando pero no se queme- y vigilando para darle vueltas según vaya cogiendo color dorado por cada uno de los lados. ¿El resultado? Pues una cubierta crujiente a la que no hace falta escurrirle la grasa, porque no la ha absorbido y que está lista en menos tiempo del que hubiéramos tenido que esperar a que se calentara el horno.
Rebozados crujientes sin grasa en el horno
Si somos muchos a comer, no vamos justo de tiempo o queremos rebozar piezas más grandes como puede ser un san jacobo o una pechuga de pollo entera, entonces no nos quedará más remedio que echar mano del horno siguiendo las recetas que seguramente muchos de vosotros ya conocéis.
San Jacobos de lomo con empanado crujiente de corn flakes
Otra alternativa al pan rallado para conseguir rebozados ultracrujientes es utilizar corn flakes triturados, que es el ingrediente principal del rebozado de estos san jacobos de lomo hechos en el horno que os enseñamos a preparar en este enlace.
Pollo a la parmesana
¿Y qué me decís de la pinta de estas pechugas de pollo? En esta ocasión el rebozado es de pan rallado con un ligero toque de queso parmesano. Todos los pasos para hacerlas en casa los tenéis explicados en este post.
Como siempre, si tenéis cualquier duda, no os cortéis y preguntad dejando un comentario en la “cajita” que tenéis un poco más abajo 🙂