Miniroscones de Reyes fáciles, receta paso a paso
Receta sencilla con explicación detallada de todos los pasos a seguir para preparar en casa unos miniroscones de Reyes fáciles para compartir.
3 enero, 2016 12:08Noticias relacionadas
Preparación: 30 min Reposo: 2 h Horno: 15-20 min
Ingredientes
- Harina de trigo, 280 g + un poco más para enharinar la encimera
- Leche templada, 80 ml
- Agua templada, 40ml
- Levadura fresca de panadería, 10 g
- Azúcar, 30 g
- Sal fina, 2 g
- Mantequilla, 30 g
- Huevo, 1
- Azúcar glass, 60 g
- Leche, 2 cucharadas
- Nata montada
- Guindas o frutas escarchadas
- Carbón de Reyes o azúcar de colores
- Para la masa de los donuts caseros sin azúcar:
- Para el glaseado de azúcar:
- Para decorar:
Dificultad: 3/5 Unidades: 8-10 Coste: < 3 €
Este año no quería complicarme la vida con el Roscón de Reyes, ni tenía ganas de amasar mucho, ni de esperar esos reposos larguísimos, ni de hacer un roscón enorme para luego repartirlo a trozos y, pensando pensando, llegué a la conclusión de que era el momento de innovar un poco, y si los americanos pueden poner de moda postres como los cronuts (una especie de donuts hechos con masa de croissants), yo este año me he lanzado a la piscina y os propongo unos mini roscones de Reyes fáciles hechos con masa de donut.
Y es que cuando se trata de hacer dulces para repartir, los tamaños minis me gustan mucho más, pues cuando regalas trozos siempre puede parecer que regalas sobras, además, en el caso del roscón de Reyes tiene la ventaja de que todos llevan sorpresa, que qué narices, todos tenemos derecho a que nos toque lo bueno, aunque sea dentro de un pastel, que para pagar ya tenemos bastante con el día a día. Así que este año, todo sorpresas buenas y nada de habas chungas.
Preparación de los Mini roscones de Reyes fáciles
Es posible hacer la masa a mano, pero como es una masa muy hidratada, hacerlo a mano lleva su tiempo por lo que es una buena ocasión para poner en marcha la amasadora.
- En el bol de la amasadora ponemos la harina con la sal y la levadura desmenuzada.
- Hacemos un hueco en el centro y echamos la leche, el agua, el azúcar, la mantequilla a temperatura ambiente y el huevo. Mezclamos durante 2 minutos a velocidad lenta y amasamos durante otros 10 minutos a velocidad rápida hasta que la masa esté completamente lisa y elástica tal como veis en la imagen superior.
- Enharinamos la encimera con un poco de harina reservada y volcamos nuestra masa sobre ella. Amasamos a mano durante un par de minutos hasta formar una bola que dejamos reposar durante hora y media en un bol tapada con un trapo limpio y en un lugar cálido apartado de corrientes de aire.
- Cuando la masa haya doblado su volumen, la pasamos de nuevo a la encimera enharinada y la aplastamos con las manos hasta tener una lámina de 1,5 cm de espesor. Es mejor aplastarla con las manos que usando rodillo.
- Vamos cortando miniroscones, boleando los recortes de masa para estirarlos de nuevo y seguir cortando más y vamos dejando cada uno sobre una bandeja forrada con papel de horno.
- Los dejamos reposar otra media hora y, mientras tanto, vamos precalentando el horno a 225ºC.
- Pasada la media hora, bajamos la temperatura del horno a 200ºC y horneamos durante unos 15 minutos con calor arriba y abajo. Si son grandecitos puede ser necesario algún minuto más.
- Mientras se hornean los miniroscones de Reyes fáciles, preparamos el glaseado mezclando el azúcar glass con la leche hasta tener una pasta.
- En cuanto los saquemos del horno, los pasamos por el glaseado y los dejamos enfriar en una rejilla.
- Para servirlos, los abrimos con un cuchillo de sierra, cubrimos la parte de abajo con nata montada y será en la nata donde “enterremos” nuestra sorpresa envuelta en un pequeño trozo de papel film, tapamos con la otra mitad y decoramos con unos trocitos de fruta escarchada y un poco de azúcar de colores. Yo como no tenía lo que he hecho ha sido rallar por encima un poco de carbón de Reyes.
Resultado
Aparte de ser una monada, estos miniroscones de Reyes fáciles tienen una ventaja y es que no hay por qué rellenarlos todos de lo mismo, de hecho, lo mejor es ir rellenándolos según se van a comer y así nos evitamos riesgos con natas y demás.