Supongo que ya habréis visto en las noticias cómo están los aeropuertos de Londres. Como a muchas otras personas, la nieve me la ha jugado y me he quedado en tierra estas navidades. Pero bueno, como dice el refrán “al mal tiempo, buena cara”, así que me he animado con una receta de Gingerbread Men (de galletas de jengibre, vamos) que podemos hacer con muy poco esfuerzo y además es súper navideña.
Sé que algunos ingredientes no son fáciles de conseguir fuera de Reino Unido, así que he escrito al lado de cada uno algunos sustitutos que se pueden utilizar en caso de no encontrarlos.
- Ingedientes para 15 galletas
- Para la masa
- 300g de harina.
- 100g de mantequilla (sacar de la nevera media hora antes de empezar).
- 150g de azúcar moreno, lo más fino posible.
- 1 huevo.
- 4 cucharadas soperas de Golden Syrup (Se puede ustituir por 4 cucharadas soperas de algún tipo de miel que sea muy clara y bastante líquida, por ejemplo las que vienen con el dosificador antigoteo).
- 1 cucharada y media de postre de polvo de jengibre (este es el ingrediente que le da el nombre a la receta y se vende en casi todos los grandes supermercados, pero si no lo encontráis y aún así queréis hacer las galletas, se me ocurre que podéis simplemente omitirlo o sustituirlo por otra especia como por ejemplo anís).
- 1 sobrecito de bicarbonato sódico (es un gasificante para respostería que viene en sobres y se compra en supermercados o farmacias).
- Para la decoración (opcional)
- Tubos de glaseado de colores para decoración de postres – Si no se pueden encontrar, necesitaremos cuatro cucharadas soperas de azúcar glass y una bolsa transparente para congelados.
- Además de todo esto, necesitamos un rodillo y un molde para cortar las galletas con la forma que queramos.
Proceso
Ponemos la harina, el polvo de jengibre, el bicarbonato sódico y la mantequilla en un bol y mezclamos con las manos deshaciendo la mantequilla con los dedos hasta que nos quede una mezcla más o menos homogénea.
Añadimos el azúcar, el huevo y el Golden Syrup (o en su lugar, la miel).
Mezclamos todo hasta que nos quede una masa consistente y que no se quede pegada en los dedos.
Si después de amasar durante un buen rato vemos que todavía está demasiado pringosa, añadimos harina muy poco a poco, hasta que quede como queramos. Si, al contrario, vemos que hemos puesto demasiada harina, podemos añadir un pelín más de huevo (pero sólo un poco, nunca echar 2 huevos, ya que será demasiado).
Echamos un poco de harina por la encimera y por el rodillo, para que no se quede pegada la masa.
Extendemos la masa con el rodillo hasta que nos quede más o menos de unos 4mm de grosor, y cortamos las galletas utilizando el molde, o usamos un cuchillo para inventar nuevas formas.
Colocamos la masa cortada en la bandeja y la metemos 10-15min en el horno, precalentado a 180grados. Si tenemos papel marrón para hornear siempre es mejor usarlo, ya que las galletas no se pegan y además no hay que fregar después la bandeja ;).
Sacamos las galletas del horno y dejamos que se enfríen un par de minutos.
Ya estarían listas, pero si queremos podemos además decorarlas.
Si habéis conseguido el glaseado de colores ya preparado, la cosa no tiene mayor complicación, dibujamos lo que queramos y listo.
Si no lo habéis conseguido tendremos que hacerlo. Para ello ponemos en un cuenco pequeño el azúcar glass y vamos añadiendo muy pocas cantidades de agua hasta que quede líquido, pero consistente.
Metemos la mezcla en una de las esquinas de la bolsa de congelados, y hacemos un corte MUY PEQUEÑO en la esquina. Usamos la bolsa a modo de manga pastelera para hacer los adornos.
Y esto sería todo. Hay que dejar que se seque el azúcar glaseado para que se endurezcan y ya tendremos listas unas galletas con las que impresionar a cualquiera estas navidades.
NOTA: Las galletas de jengibre son algo durillas; así es como deben ser. Si veis que os vais a romper un diente al morderlas, entonces sí que os habéis pasado, pero en general son más duras que una galleta normal.
Resultado
La verdad es que salen muy ricas y ¡quedan impresionantes! Yo me las he llevado a la oficina y han volado. Como duran bastantes días, también les he traído unas cuantas a mi familia, ya que después de cuatro vuelos cancelados y muchas horas de viaje, he conseguido finalmente pasar las navidades en casa :).
Os dejo unas fotos de un par de galletas curiosas que hice y espero que nos mandéis las vuestras y nos digáis qué tal os han salido.
¡Feliz Navidad a todos!
Tiempo: 30 minutos
Dificultad: 1/5
Digestión: 1/5
Precio: Menos de 5€.