Hoy os traemos una de esas recetas que al amante del pescado le encanta, pero que además puede hacer que a el que no le acaba de encantar, le guste. Yo soy de este segundo grupo, pero este es un plato muy rico y que se deja comer muy pero que muy bien. No es otro que un clásico de la cocina española: Lubina al horno, con patatas panaderas y cebolla.
Ingredientes (para 4 personas)
- 2 lubinas
- 1 cebolla
- 1-2 patatas grandes
- vino blanco
- aceite de oliva
- orégano y sal
Es un plato mucho más sencillo de hacer de lo que parece. Lo primero de todo es que pidáis el pescado preparado y limpiado para este plato, sólo tenéis que hablar con el pescadero, él sabe qué hacer. Necesitamos dos lubinas pero fileteadas de tal manera que tengamos de 4 mitades, una por persona. Primero empezamos con la guarnición. Pelamos y cortamos las cebollas y las patatas. La cebolla lo más fino posible, como si fueran casi hilos de cebolla. Las patatas en rodajas de unos 2 centímetros de grosor. La cebolla la pochamos pero no del todo y las patatas las rehogamos un poco para que estén más crujientes al final.
Y ahora empieza lo bueno: en una fuente, disponemos un chorro de aceite de oliva y colocamos las patatas de forma bien distribuida justo encima de la cebolla, con la que cubrimos toda la fuente o bandeja. Colocamos los filetes encima de la cama hecha de patatas y cebolla y regamos con vino blanco, otro chorrito de aceite y lo cubrimos todo de orégano.
Ahora tendremos que meterlo al horno (precalentado previamente), dejando que se haga la lubina durante una media hora a 180º. Y ya. Nada más. Luego ya es emplatar y disfrutar. Que aproveche
Tiempo: 30-40 minutos
Dificultad: 2/5
Digestión: 2/5
Precio: 12 €