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- Comensales: 4
Cualquier guiso de lentejas es fácil de hacer, rápido, generalmente barato y es perfecto para congelar, recalentar y llevar a cualquier parte. Vamos, es perfecto para que forme parte del batch cooking semanal de cualquiera. Aunque las más clásicas sean las lentejas con chorizo o las lentejas con chistorra, hay un mundo más allá y también son fabulosas las lentejas con verduras o hasta las lentejas con bacalao.
Estas lentejas con pavo parten de un sofrito de verduras y luego se agrega el pavo al final. Pavo que puede ir en taquitos o que podría incorporarse también picado y salteado, muy crujiente, casi haciendo una boloñesa con las lentejas. Lentejas, ajo, cebolla, calabacín y un buen caldo serán los ingredientes básicos para lograr un plato reconfortante y delicioso.
En cuanto al caldo, puede ser de pavo, pero también de pollo o de verduras. Si no se tuviera, siempre se puede optar por utilizar agua y un poco de polvo de caldo de pollo natural (los hay de calidad, nada que ver con las pastillas llenas de potenciadores de sabor).
Una receta de lentejas muy versátil
Como se ve, el guiso arranca neutro y es al final donde entra en juego el pavo por lo que la misma fórmula valdría para cualquier otro ingrediente protagonista: cerdo, merluza, sardina, ternera... También se podría utilizar restos de pavo asado y jugo de ese mismo asado, en lugar de emplear pavo fresco. Es una opción fabulosa para aprovechar los restos de otras recetas y darle un sabor a un plato de lentejas.
Aunque la receta se ha hecho con lentejas pardinas, se podría hacer el guiso también con castellanas, beluga (las negras) o hasta con las rojas peladas. Con estas últimas la cocción sería muy breve. Y no, no hace falta dejarlas en remojo el día anterior. Son la única legumbre que se salva de este paso.
Cómo hacer unas lentejas con pavo
Ingredientes
- Cebolla grande, 1 ud
- Diente de ajo, 2 ud
- Zanahoria, 2 ud
- Calabacín, 1/2 ud
- Pechuga de pavo, 1 ud
- Aceite de oliva virgen extra, 4 cucharadas
- Sal, c/s
- Pimienta blanca molida, 1 cucharadita
- Laurel, 1 hoja
- Lentejas pardinas, 200 g
- Caldo de pollo, 2 litros
Paso 1
Preparar el sofrito
Paso 2
Cocer las lentejas
Paso 3
Saltear el pavo
Paso 4
Añadir el pavo a las lentejas
Paso 1
Pelar la cebolla y picarla finamente. Lavar el calabacín, pelarlo y trocearlo en cuadraditos. Hacer lo mismo con la zanahoria. Picar también el diente de ajo una vez pelado.
Paso 2
En la olla donde se vayan a elaborar las lentejas, pochar la cebolla junto con el ajo picado y la zanahoria con un poco de aceite de oliva y de sal a fuego suave. Hasta que tome un poco de color y quede tierno. Añadir entonces el calabacín y seguir cocinándolo a fuego medio hasta que éste también quede tierno.
Paso 3
Agregar entonces las lentejas, la pimienta negra, la hoja de laurel y regar con el caldo de pavo, pollo o vegetal. Si no tuviéramos, se podría hacer con agua. Subir el fuego y esperar a que rompa a hervir, incorporar un poco de sal y bajar el fuego hasta que el hervor sea suave. Tapar y dejar cocinar durante unos 40 minutos, hasta que las lentejas estén tiernas y quede la cantidad de caldo deseada. Si se ve que queda poco caldo, incorporar más a medida que se vaya necesitando.
Paso 4
Triturar una pequeña cantidad de lentejas para que esa crema trabe el guiso.
Paso 5
Trocear la pechuga de pavo en tacos. Saltear esos tacos a fuego máximo con un chorrito de aceite de oliva. Condimentar con sal y pimienta negra. Cuando estén dorados, retirar y añadir a las lentejas, dejar cocinar en ellas durante dos o tres minutos para que se cocinen en su interior. Desglasar la sartén donde se ha cocinado el pavo con unas gotas de agua y verter esa agua en las lentejas, así todo el sabor del pavo que haya quedado en la sartén se irá a las lentejas.