- Total: 1 h
- Comensales: 4
El relleno más habitual de la lasaña suele ser lo que nosotros conocemos como boloñesa, aunque los italianos lo llaman ragú. Contrariamente a lo que pensamos en España, el tomate no es básico en esta salsa y la realidad es que hay una variante que no lleva tomate y sí leche y en ocasiones nata. La peculiaridad de esta receta es el uso de cordero de nuestra tierra,
Si os gustan las recetas de cordero, sin duda esta es una versión diferente y sencilla que se sale del clásico cordero asado y de otras recetas típicas de celebraciones. Esta receta, además, es perfecta para incluir esta carne en nuestra dieta diaria, pues el cordero no es algo exclusivo de las fiestas navideñas y del domingo de Pascua. La de cordero es una carne fácil de cocinar y muy versátil, además, al proceder de pastoreo es un alimento sostenible y natural.
La carne de cordero picada la podéis picar vosotros en casa a partir de la pieza de la pierna, pero también hay carniceros que os la pican en sus picadoras industriales, os recomiendo hacer solamente una pasada por esta máquina para que no se quede la carne pastosa.
Otra opción es picarla en casa con un poco de paciencia y un cuchillo muy bien afilado o con un robot de cocina, aunque si elegimos esta última opción debemos tener cuidado de no pasarnos para no convertir la carne en una pasta.
Como hemos hablado al principio, queríamos que esta receta fuese para toda la familia y, para hacerla más inclusiva, hemos utilizado leche y queso sin lactosa, así si algún miembro de la familia tiene alguna intolerancia, podrá tomarla sin problemas.
Cómo hacer lasaña de cordero sin lactosa
Ingredientes
- Cebollas blancas pequeñas, 2 ud
- Zanahorias amarillas (o normales), 2 ud
- Carne picada de cordero, 500 g
- Tomillo seco
- Estragón
- Ajo en polvo, 1/2 cucharadita
- Pimienta negra molida
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra para sofreír, 4 cucharadas
- Placas de canelón, 12 ud
- Queso rallado sin lactosa, 80 g
Para la bechamel
- Aceite de oliva suave, 50 ml
- Harina, 50 g
- Leche sin lactosa, 750 ml
- Sal
Paso 1
Lo primero será realizar el sofrito para la farsa de cordero. Pelamos la cebolla y la picamos en brunoise. También pelamos la zanahoria y la cortamos en cuadraditos pequeños. Ponemos en la olla la cebolla y la zanahoria, el aceite de oliva y un poco de sal y calentamos. Sofreímos a fuego medio removiendo constantemente hasta que todo alcance un tono ligeramente caramelizado.
Paso 2
Cuando el sofrito esté listo añadimos la carne picada de cordero y también el tomillo, el estragón, la pimienta negra molida y el ajo en polvo. Si vemos que hace falta incorporamos más aceite de oliva para que no tenga aspecto seco. Como la carne es muy tierna y tiene grasita nos quedará una farsa tremendamente jugosa. Aquí, si queremos, le podemos echar un poquito de vino, pero no es necesario. Sofreír hasta que toda la carne cambie de color y se haya conseguido un conjunto homogéneo. Poner a punto de sal y reservar
Paso 3
Cocer las placas de canelón según marque el fabricante. Colar y dejar enfriar en agua fría, con las placas bien separadas para que no se peguen las unas a las otras. Cuando las estemos cociendo es importante separarlas dentro de la misma olla.
Paso 4
Preparar la bechamel, para ello calentar el aceite de oliva y añadir la harina. Remover a fuego suave durante un par de minutos mientras que la harina se cocina. Tras este tiempo añadir la leche a temperatura ambiente y remover con unas varillas a fuego medio hasta que coja consistencia. Incorporar por último la sal. Tiene que quedar una bechamel sedosa, no muy densa. Si veis que queda muy densa habrá que añadir más leche.
Paso 5
Precalentar el horno a 200 ºC con el grill encendido. Donde vayamos a servir la lasaña poner una base de bechamel, luego placas de canelón o lasaña y encima nuestra farsa de cordero. Encima otra placa y más carne y terminaremos para rematar con una buena cantidad de bechamel.
Paso 6
Por encima poner queso rallado sin lactosa y llevar al horno a gratinar, lo justo para que esté bien dorada.
Paso 1
Lo primero será realizar el sofrito para la farsa de cordero. Pelamos la cebolla y la picamos en brunoise. También pelamos la zanahoria y la cortamos en cuadraditos pequeños. Ponemos en la olla la cebolla y la zanahoria, el aceite de oliva y un poco de sal y calentamos. Sofreímos a fuego medio removiendo constantemente hasta que todo alcance un tono ligeramente caramelizado.
Paso 2
Cuando el sofrito esté listo añadimos la carne picada de cordero y también el tomillo, el estragón, la pimienta negra molida y el ajo en polvo. Si vemos que hace falta incorporamos más aceite de oliva para que no tenga aspecto seco. Como la carne es muy tierna y tiene grasita nos quedará una farsa tremendamente jugosa. Aquí, si queremos, le podemos echar un poquito de vino, pero no es necesario. Sofreír hasta que toda la carne cambie de color y se haya conseguido un conjunto homogéneo. Poner a punto de sal y reservar.
Paso 3
Cocer las placas de canelón según marque el fabricante. Colar y dejar enfriar en agua fría, con las placas bien separadas para que no se peguen las unas a las otras. Cuando las estemos cociendo es importante separarlas dentro de la misma olla.
Paso 4
Preparar la bechamel, para ello calentar el aceite de oliva y añadir la harina. Remover a fuego suave durante un par de minutos mientras que la harina se cocina. Tras este tiempo añadir la leche a temperatura ambiente y remover con unas varillas a fuego medio hasta que coja consistencia. Incorporar por último la sal. Tiene que quedar una bechamel sedosa, no muy densa. Si veis que queda muy densa habrá que añadir más leche.
Paso 5
Precalentar el horno a 200 ºC con el grill encendido. Donde vayamos a servir la lasaña poner una base de bechamel, luego placas de canelón o lasaña y encima nuestra farsa de cordero. Encima otra placa y más carne y terminaremos para rematar con una buena cantidad de bechamel.
Paso 6
Por encima poner queso rallado sin lactosa y llevar al horno a gratinar, lo justo para que esté bien dorada.