- Total: 50 min
- Comensales: 4
Con esta receta de conejo asado al horno tendrás un plato perfecto y económico para sorprender en los días de fiesta. Además se trata de una carne blanca y con pocas calorías que, cocinándola en el horno, la tendrás lista en poco más de media hora.
Ingredientes
- Conejo entero cortado en cuartos, 1
- Tomates cherry, 200 g
- Cebollas, 2 medianas
- Patatas medianas, 4
- Sal gorda, pimienta, romero y tomillo
Paso 1
Precalentar el horno
Paso 2
Asar conejo con la cebolla
Paso 3
Freír patatas
Paso 4
Dar vuelta al conejo, añadir patatas y tomates cherry y terminar de hornear
Cómo asar un conejo al horno
Se trata de una carne que no necesita horas y horas de cocción por lo que es perfecta para que la puedas cocinar junto con alguna guarnición, como pueden ser unas patatas o unas verduras asadas.
Paso 1
Precalentamos el horno a 200ºC y mientras se calienta vamos sazonando los cuartos de conejo (lo más cómodo es pedirle al carnicero que nos lo corte en cuartos para asar). Primero lo salamos y le echamos pimienta, romero y tomillo, sin pasarnos, pero que quede ligeramente cubierto de manera uniforme.
Paso 2
En una fuente para horno que sea un poco honda ponemos una cama hecha con la cebolla cortada en juliana y salpimentada, acomodamos encima los cuartos del conejo y la introducimos en el horno a 200ºC. Horneamos entre 15 y 20 minutos hasta que veamos que la carne tiene un color blanquecino.
Paso 3
Mientras tanto cortamos las patatas en dados de unos 2 centímetros y las freímos hasta que estén hechas.
Paso 4
Cuando hayan pasado unos 15-20 minutos y tenga un color blanquecino lo sacamos del horno, le damos la vuelta, añadimos por encima los tomates cherry en mitades y las patatas, y volvemos a meter la fuente en el horno durante otros 15-20 minutos más. Nuestro conejo asado estará listo cuando haya cogido color por fuera, aunque podemos dejarlo unos minutos más si nos gusta bien hecho y crujiente.
Notas
Al conejo al horno le va genial el toque del tomillo y el romero, que le dan ese sabor a campo tan característico, aunque si no os gustan podéis sustituirlas por otras que os gusten más, como por ejemplo, un majado de ajo y perejil o simplemente no poner nada más que la sal y la pimienta.