Me encantan las alcachofas, lo reconozco. Cuando están en temporada podría comerlas todos los días y cuando se están acabando procuro hacerme con una buena cantidad para congelarlas y poder seguir disfrutándolas alguna semana más… ¡lástima que mi congelador sea enano :(!. Por eso, cuando el otro día en el avance de Masterchef vi que en el siguiente programa iba a salir Maribel con sus alcachofas se me hizo la boca agua en el momento y, claro está, se me antojó cocinar algo con este ingrediente. Suerte la mía que el otro día encontré unas cuantas en el mercado.

Ingredientes (3 raciones)

  • 600 g de conejo limpio y troceado
  • 2 calabacines no muy grandes pelados y cortados en rodajas (es mejor que no sean muy grandes para que no tengan semillas duras)
  • 1 pimiento verde cortado en aros o en tiras
  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 2 tomates pequeños o uno grande
  • 4 alcachofas hermosas
  • el zumo de un limón
  • 1 o 2 hojas de laurel
  • una cucharadita de tomillo
  • 2 vasos de agua
  • zanahoria cortada en bastones (crudités) para acompañar
  • sal y pimienta al gusto

Al principio, pensé en cocinar alguna receta básica, como estas alcachofas fritas, que son deliciosas y que os recomiendo encarecidamente que probéis porque vais a alucinar, pero luego me acordé de unos trozos de conejo que llevaban tiempo en el congelador y lo tuve claro, un guisote super sencillo y ligero para lucirse, con una salsa para comerla a cucharadas y sin remordimientos, porque no lleva prácticamente nada de grasa.

Tomad nota porque si queréis organizar una comilona en casa sin dejar a un lado la operación bikini, esta es vuestra receta.

Preparación del guiso ligero de conejo con alcachofas

  1.  Salpimentamos los trozos de conejo, pincelamos el fondo de una sartén con media cucharada de aceite y doramos el conejo a fuego alto (9/12). Cuando esté listo lo reservamos.
  2. En una cacerola ponemos una cucharada del aceite restante y agregamos el pimiento, el tomate cortado en trocitos y el calabacín, salamos ligeramente y salteamos durante unos segundos.
  3. Acomodamos los trozos de conejo sobre las verduras, cubrimos con el agua, añadimos el laurel y el tomillo, una pizca de sal y tapamos la olla. Dejaremos cocinar con la olla tapada a fuego bajo (3/12) durante aproximadamente una hora.
  4. Mientras tanto limpiamos las alcachofas retirando las hojas duras y las puntas y las introducimos en un bol con agua y el zumo de un limón.
  5. Cuando la carne esté casi tierna, añadimos tres de las alcachofas cortadas en cuartos y dejamos que se siga cocinando con la olla destapada y sin subir el fuego durante 15 o 20 minutos más.
  6. Retiramos los trozos de conejo y las alcachofas de la cacerola y pasamos el resto a un bol, trituramos la salsa con la batidora, la colamos con un chino, la rectificamos de sal y la devolvemos a la olla. Ponemos la carne y las alcachofas sobre la salsa y llevamos al fuego un minuto más.
  7. La alcachofa que queda la cortamos en láminas finas y la pasamos por la plancha con un poco de sal y la media cucharada de aceite que nos queda.
  8. Servimos el guiso con unas láminas de alcachofas a la plancha y unos crudités de zanahoria.

Resultado

¿Quien dijo que los guisotes eran bombas calóricas? Acabáis de comprobar que hay excepciones y que se puede disfrutar de un buen guiso casero sin remordimientos.

Yo esta clase de guisos suelo prepararlos en una cocotte, pero sirve cualquier cazuela. Incluso si váis con prisa podéis hacerlo en la olla exprés o rápida y en 20 minutos lo tenéis listo.