No os voy a engañar, esta semana no tenía tiempo de hacer la receta para el blog.

Había pensado en hacer las croquetas caseras de cebolla que hace mi madre, o un pastel de fresas, nata y bizcochos de soletilla de lo más sencillo, pero para elaborar cualquiera de las dos tenía que ir a comprar algunos ingredientes que me faltaban y ya os he dicho que tiempo no tenía.

Ingredientes

  • 10 alitas de pollo
  • 2 Naranjas grandes
  • 1 Tacita de salsa de soja
  • 1/2 cucharada de pimienta
  • 1 diente de ajo
  • 2 cucharaditas de miel

Como estaba falta de ideas cogí los más de 20 libros que tengo en casa y me puse a rebuscar. Todo era demasiado complicado, étnico, o moderno. Ya casi desesperada y a punto de hacer huevos fritos con patatas encontré un librillo de publicidad de un supermercado que tenía algunas recetas una gran sorpresa que me ha solucionado la papeleta: Alitas de pollo con salsa de naranja.

Preparación

Tenéis que pelar una de las naranjas ( la otra será para decorar) pero sin llegar a la parte blanca, para después escaldar durante dos minutos esa monda fina en agua hirviendo.

Mientras la piel de la naranja está en el agua, mezclar en un bol el diente de ajo picadito, la miel, la salsa de soja, la pimienta y el zumo de la naranja que tenéis pelada.

Cuando la piel esté escaldada, mezclar con el resto de ingredientes en el bol y terminar de remover hasta que la miel esté bien ligada con el resto de ingredientes.

Cuando nuestra salsa esté lista tenemos que añadir las alitas y dejarlas macerar en la nevera durante unas dos horas. Yo las dejé durante un poco menos y salieron buenísimas y si las dejáis listas por la noche para hacerlas al día siguiente seguro que están de lujo.

Cuando las alitas estén bien maceradas tenéis que sacarlas de la salsa y meterlas en el horno, a unos 200º durante 20 minutos, añadiendo de vez en cuando un poco de la salsa que hemos reservado.

Resultado

Esta receta me ha sorprendido desde el primer momento, lo primero porque no esperaba encontrarla en un librillo tan cutre como en el que la encontré y lo segundo porque el sabor es realmente asombroso. Os aconsejo que si el picante no os gusta echéis mucha menos pimienta, porque la verdad que sí que puede llegar a ser un poco fuerte.

Una mezcla 100% recomendable 🙂