Ni son para mujeres ni son para quienes no saben de vino. Los blancos y los rosados son la alternativa perfecta para sobrellevar la subida de temperaturas que nos está esperando a la vuelta de la esquina. Un remedio fresco, ligero y sabroso contra los cambios de tiempo propios de esta época del año, que cada vez gana más terreno en las cartas de los mejores restaurantes.
Si quieres celebrar la llegada de la primavera por todo lo alto, te recomendamos los mejores vinos para acompañarla.
Larrosa Blanca 2018, Bodegas Izadi
Acaba de salir al mercado y ya nos ha robado el corazón. Siguiendo la estela de su hermano rosado, Bodegas Izadi vuelve a apostar por las variedades autóctonas con este vino elaborado solo con garnacha blanca y que destaca por su estilo y su elegancia. Ideal para la primavera y el verano, Larrosa Blanca recoge la esencia de esta singular uva de la Rioja Alavesa para ofrecer un vino fresco pero intenso, muy aromático y frutal, con una boca golosa y una acidez traducida en frescura.
PVP: 6,90 €
Lía de Pradorey 2018
En 2013, Pradorey se convirtió en la primera bodega de Ribera del Duero que elaboraba un vino color rosa pálido, un tempranillo de corta maceración que triunfaba entre amateurs y expertos. Ese rosé era Lía, que estrena nueva añada con un look renovado y un contenido que recuerda a los mejores rosados provenzales.
Delicado y sutil, y a la vez dinámico y versátil, es perfecto para los amantes de los vinos frescos y ligeros. Una etiqueta que forma parte de una colección de vinos más rebeldes y actuales, en la que también se encuentran El Cuentista (el primer pinot noir de la bodega) y Sr. Niño (un tinto 100% ecológico).
PVP: 8 €
Viñas del Vero Gewürztraminer
Con sus destellos verdosos, su embriagadora paleta aromática con recuerdos florales y de fruta exótica, y su boca aterciopelada y untuosa, el gewürztraminer de Viñas del Vero es un vino realmente singular. Razones no le faltan. La uva alsaciana de nombre impronunciable es una rara avis en España, aunque parece haberse aclimatado muy bien en el Somontano.
El pago El Enebro, un paraje de suelo franco con orientación norte y situado a 400 metros sobre el nivel del mar, presenta las mejores condiciones para que esta variedad muestre todo su potencial. Muy aromática, con unos niveles de azúcares naturales altos y un extravagante buqué con notas de lichi, este vino es perfecto para acompañar platos asiáticos.
PVP: 9 €
Malvasía Aromática, Bodegas El Sitio
Si algo tienen las Canarias son viñedos singulares como en el que crecen las uvas con las que se elabora este vino. Situadas al sur de Tenerife, sobre suelo volcánico y a una altitud de 50 metros, las vides de malvasía aromática de El Sitio hacen honor a su nombre con unas privilegiadas vistas al mar.
Libres de filoxera, las viñas viejas de esta parcela dan lugar a un monovarietal de lo más singular que envejece sobre lías finas durante tres meses antes de expresar toda su estructura. Frutas tropicales, cítricos y flores blancas en nariz, y un paladar fresco y frutal que armoniza a la perfección con crustáceos y pescados. Sobre todo si tienen acento guanche.
PVP: 21 €
Rita, Bodegas Habla
Elegante, sensual, delicado y glamuroso. Así es el sugerente rosado de Bodegas Habla, cuya botella se ha inspirado en las curvas de Rita Hayworth. Y de ahí su nombre. Hayworth es un icono de Hollywood, y el tapón de cristal hace un guiño a los míticos guantes negros de su papel más popular, Gilda.
Rita es un cuidado ensamblaje de syrah y garnacha con notas a pomelo, frambuesa, violeta y laurel, procedente de los viñedos ecológicos que la bodega extremeña controla en Côte de Provence, al sur de Francia. Frente a la montaña Sainte Victoire, en una zona de suelos arcillosos plantados con cepas de 40 años de antigüedad, nace esta joya de alta costura con mucha personalidad.
PVP: 24 €
María Andrea 2017, Bodegas Eduardo Peña
Este vino gallego que toma el nombre de un personaje histórico conocido en la tierra como ‘la Agustina de Aragón de Ourense’, sigue la línea diferenciadora de los blancos de Eduardo Peña. María Andrea nace de 7 hectáreas de viñedos plantados a orillas del Miño, y su particular elaboración permite disfrutar de una elegante expresión de la fruta y el terruño de esta zona.
Antes de vinificarse por separado, las uvas (treixadura, loureira y albariño) se congelan para traspasar una mayor concentración de aromas al mosto. Un cuidado trabajo de lías le aporta a su vez mayor estructura y complejidad, y un tiempo en botella acaba de redondear el conjunto aromático y gustativo de este Ribeiro frutal y mineral a partes iguales.
PVP: 10,85 €
Vinea Rosado 2018, Finca Museum
La bodega vallisoletana Finca Museum no se conforma con sacar al mercado una nueva añada de su vino rosado, sino que lo hace apostando por un cambio radical de imagen. Una imagen que incluye mensaje relativo a los aspectos fundamentales de su elaboración: la variedad tempranillo por excelencia, los 800 metros de altitud del viñedo, sus suelos pobres, una viticultura sostenible, el clima extremo de la zona y la característica principal de este vino, su equilibrio. Vinea Rosado 2018 sorprende por su color fresa pálido, por la mineralidad en su aroma y por un equilibrio en boca que lo hace sedoso y elegante.
PVP: 7 €
Torre la Moreira, Marqués de Vizhoja
Todo comienza en un antiguo secadero de tabaco reconvertido en bodega, donde la modernidad de los depósitos de acero inoxidable con control de temperatura dio paso a la nueva y actual forma de elaborar los vinos de la casa. Y continúa en el Pazo La Moreira como sede del imaginario Marquesado de Vizhoja, un edificio icónico y representativo de la antigua nobleza gallega y de las formas tradicionales de cultivo y explotación de la tierra.
Torre La Moreira es el albariño más puro de las Bodegas Marqués de Vizhoja, un Rías Baixas goloso, suave y afrutado, elaborado con uvas propias seleccionadas y recolectadas manualmente, pionero en incluir en su etiqueta el sistema de lectura braille.
PVP: 8,65 €
5 Rosas, Losada Vinos de Finca
5 Rosas es como un ramo de flores recogidas en el Bierzo. Un buquet de aromas varietales, intenso y goloso, en el que destacan las frutas rojas y que es capaz de hacer florecer la primavera en cada copa. Su elaboración tradicional, con uva mencía procedente de una de las parcelas más nuevas de la bodega, ubicada en la zona del Alto de Pieros, también conocida como “la pequeña Borgoña española”.
El aporte de unos suelos arcillosos y una crianza sobre lías finas en depósito de acero inoxidable, hacen que este vino sea especialmente fresco, afrutado y divertido. Muy versátil. Una etiqueta muy esperada que causará sensación entre los amantes de esta variedad tinta.
PVP: 7,50 €