Cuando yo era pequeña, la ginebra era Larios, la tónica era Schweppes y salía un señor con gafas que le ponía una rodaja de limón y nos decía que aprendiéramos a amarla con la frase aquella de “si no te gusta, es que la has probado poco”.
Y se ve que le hicimos caso, porque ahora en las estanterías de mi supermercado habitual hay más marcas de ginebras y de tónicas que de leche. Ante semejante variedad, casi hay que hacerse un curso de coctelería especializada para saber qué tónicas combinan con cada ginebra. Así que hemos hecho los deberes y ya hemos averiguado a qué ginebras les va la tónica a la pimienta rosa -lo sé, suena a aliño para ensalada-, a cuáles les favorece la tónica con cardamomo y cuáles son las que se apañan con la tónica de toda la vida. Seguid leyendo que os lo contamos.
Ginebras y tónicas
Antes de ponernos a mezclar como locas, vamos a empezar por el principio y vamos a conocer un poco más sobre las bebidas que vamos a utilizar.
¿Qué es la ginebra?
Es una bebida alcohólica destilada clara -no envejecida- con origen similar al vodka pero que, a diferencia de este, se aromatiza con bayas de enebro (son las que le dan el sabor más característico) y en ocasiones también con otros elementos. Según sea la naturaleza de estos otros ingredientes aromatizantes que se añaden, que se conocen como “los botánicos”, las ginebras se pueden clasificar en 5 grupos.
- Florales. Entre los botánicos destacan las flores como el jazmín, la violeta o las rosas. Como ejemplos podemos citar la Fifty Pounds o la Pink 47.
- Especiadas. Los botánicos que destacan en ellas son ingredientes como la canela, el cardamomo, la pimienta, la nuez moscada. A este grupo pertenecen ginebras como la Brecon o la Citadelle.
- Cítricas. Predominan elementos como la lima, el limón, la mandarina, el pomelo o la naranja. Tal es el caso de la Tanqueray nº Ten, la Larios 12 o la London nº1.
- Herbales. Destacan principalmente los matices de hierbas aromáticas como el tomillo, la albahaca o el romero. Ejemplos conocidos la Gin Mare o la Blackwoods.
- Clásicas. No destaca ningún botánico adicional y su principal aromatizante es el enebro. La ginebra clásica por excelencia es la Tanqueray.
Como además, es muy común que las ginebras mezclen botánicos de varios grupos, los entendidos representan los botánicos en un pentágono -técnicamente hablando es lo que se conoce como un diagrama de radar- que podéis ver en la imagen inferior. Con este diagrama nos podemos hacer una idea de todos los matices que tiene una ginebra determinada y cuáles son los que predominan.
¿Qué es la tónica?
Es una bebida azucarada carbonatada y aromatizada con quinina. En sus orígenes no era un refresco, sino que era una bebida medicinal que se inventó en la India buscando una manera de suavizar el sabor de la quinina que debían tomar los soldados ingleses para prevenir la malaria. Con el tiempo, la bebida llegó a Inglaterra y empezó a ser muy popular entre las clases adineradas que la utilizaban para mezclarla con la ginebra.
En general, las tónicas se pueden clasificar en 3 grupos:
- Clásicas. Son las más amargas y carbonatadas, como por ejemplo la Schweppes Original, la Nordic Mist o la Fentimans.
- Modernas. Con menos amargor y menos gas, como por ejemplo la Boyland.
- Aromatizadas. Tienen ingredientes adicionales que les aportan matices que intensifican o complementan los de determinadas ginebras, como por ejemplo las tónicas con pimienta rosa, gengibre y cardamomo o lavanda y azahar.
Qué tónicas combinan con cada ginebra
Y ahora que ya hemos visto qué es lo que tenemos entre manos, os hemos preparado unas tablas a modo de resumen con un buen puñado de ginebras conocidas y las tónicas que más les van y, ya puestos a prepararnos un gin tonic en condiciones, hemos añadido otra columna con los complementos qué mejor combinan con la mezcla elegida.
Y ahora es cuando nos toca recordaros eso de que bebáis con moderación, de que si bebéis no cojáis el coche, etc, etc.
Fuente | Gros Mercat