Desde la recogida de la manzana hasta el embotellado, la sidrería El Pareón en Siviella, un pequeño pueblo de la provincia de Asturias elabora su propia sidra ecológica. Esta sidrería además, de un restaurante típico de la zona es un pequeño trozo de historia y gastronomía que acoge al comensal desde su llegada.

Y es que todo queda en familia dentro de este lagar situado bajo los salones del restaurante.

La elaboración de la sidra es natural. La familia de Soraya González, propietaria y directora del lagar, recoge la manzana de los campos de la zona a finales de septiembre y realizan todo el proceso de forma ecológica.

Una vez recogida la manzana se procede a la molienda, donde se machaca el fruto  con bastos martillos de madera, una vez que la fruta esté lista, se echa a la prensa, donde se deja macerar de dos a tres días y se procede al prensado. De ahí sale el primer mosto dulce. A partir de este momento, se remueve la manzana troceada de la prensa y se deja reposar de dos a tres días más, el segundo prensado es el zumo que sale con menos azúcar.

Tras terminar el proceso de fermentado, es cuando el mosto se prepara para fermentar. En el caso de la sidrería El Pareón, el zumo de manzana se almacena en sus barriles, en un lugar oscuro y fresco, a no más de 10 grados. Es entonces cuando se deja fermentar para que el azúcar se convierta en alcohol. Durante este proceso también se eliminan los gases y las espumas, elementos llamados “borras” que el fermentado de este zumo provocan, garantizando así un grado de acidez perfecto y una calidad suprema.

El hecho de que esta sidra sea totalmente ecológica y natural conlleva que la densidad del zumo sea mayor que las sidras industriales. Igual pasa como los grados alcohólicos.

Una vez finalizado el proceso de fermentación, que dura varios meses, se procede al  embotellamiento de la sidra. Para ello, se hace una primera cata por el lagar. En el que se determina que el sabor y la calidad de la sidra es la adecuada. Entonces es cuando se embotellan dos botellas. Una se queda en el lagar y otra se manda a Madrid, donde Sanidad debe dar el visto bueno y comunicar al lagar que esa sidra es puramente ecológica y apta para vender.

Todo el proceso es elaborado en el lagar de la sidrería El Pareón, donde además de poder comprar una de las mejores sidras naturales de España se puede disfrutar de la cocina típica de la zona y de un ambiente espectacular y único entre campos de manzanos.