Un último gran incendio ha sacudido a Madrid: ha dejado dos muertos y diez heridos. Ha sucedido en el restaurante italiano Burro en la plaza Manuel Becerra. Todo ocurrió a raíz de una pizza flambeada.
Este incendio, en el que participaron 12 bomberos del Ayuntamiento de Madrid para extinguir las llamas y auxiliar a los heridos, abre el debate sobre por qué hay ciertas comidas que se flambean y los riesgos que esto conlleva.
¿Por qué se flambea la comida?
El objetivo de flambear es intensificar el sabor de la comida, hacerla más crujiente —consiguiendo así un aspecto y un sabor totalmente distinto si se fríen en la sartén—, y agregar un sabor ahumado y caramelizado al plato.
La técnica culinaria consiste en rociar los alimentos con alcohol de alta graduación y, acto seguido, prenderles fuego para que el alcohol se evapore y la llama se apague. Las bebidas que más se suelen usar son brandy, coñac, whisky y ron.
Para poder flambear sobre la sartén, esta debe de estar muy caliente. Después se añade el alcohol y se procede a prenderle con un soplete, lo que genera la llama.
¿Qué tipos de comidas se flambean?
Hay una gran variedad de comidas que se pueden flambear. Los platos pueden ser tanto dulces como salados. Los más comunes que se flambean son:
1. Carnes, como por ejemplo solomillo de ternera, magret de pato flambeado, conejo, chuletas, costillas, pollo y salchichas. E incluso paté y chorizo.
2. Pescados y mariscos, como los langostinos, chipirones, cigalas y navajas.
3. Verduras, como los champiñones, guisantes, espárragos y cebollas.
4. Pizzas de todos los sabores.
5. Postres y dulces. Los más típicos son el plátano, crepes, natillas, suflé, naranjas y manzanas.
6. Incluso las bebidas se flambean. Un ejemplo son los cócteles, para así bajar la graduación alcohólica y presentar la bebida de forma espectacular al servirlas al cliente.
Es recomendable no flambear los platos fríos o ensaladas, ya que se requiere calor para prepararlo.
¿Qué riesgos tiene flambear?
Como ha ocurrido en el restaurante italiano de Madrid, si no se pone especial cuidado y atención al flambeado, se puede correr el riesgo de provocar incendios o desastres en la cocina. Al fin y al cabo, se prende fuego a la comida por lo que, para poder flambear, hay que dominar esta técnica y tener claro los riesgos de la misma. Flambear la comida puede ser peligroso si no se hace correctamente y con precaución.
Algunos de los riesgos asociados con el flambé son:
1. Incendios: si se usa demasiado alcohol o se aplica fuego a la comida incorrectamente.
2. Quemaduras: si el alcohol se prende de forma repentina puede provocar quemaduras graves en la piel.
3. Intoxicación: el alcohol que se utiliza para el flambeado puede emitir vapores tóxicos que pueden ser inhalados, por lo que es importante tener una buena ventilación en la cocina y trabajar en un espacio abierto.
4. Degustación incorrecta: al flambear la comida, el alcohol puede evaporarse y cambiar el sabor del plato. Si no se cocina bien, puede quedar alcohol sin evaporar en la comida, lo que puede ser peligroso y desagradable al sabor.