Hay vida y muchos planes más allá del centro de Madrid. Está claro que la oferta gastronómica con la que cuenta la ciudad es envidiable, donde las nuevas propuestas brotan incesantes de norte a sur y de este a oeste, pero pasada la M-30 se extiende también un interesante abanico de posibilidades donde satisfacer el deseo de una buena comida o desconectar de la rutina y de vez en cuando resetear.
Un buen lugar para conseguirlo, con acento argentino, es Chulengo. Ubicados en la calle Playa de la Concha, 2, en Boadilla del Monte, está solo a 20 minutos de la ciudad y su mayor apuesta -además de esas carnes que tanto miman en la parrilla- es un dispensador de vino automático para que seas tú quien mande sobre tu copa y nadie más.
No es la primera vez que nos encontramos con este artilugio que permite al cliente degustar una simple copa de vino sin tener que pedir la botella entera. Una tendencia que poco a poco empieza a despegar en restaurantes y aunque es más común en otros mercados, ya comienza a verse en diferentes locales especializados de España.
En Chulengo, su dispensador de vino automático de última generación permite poder disfrutar de un maridaje internacional, degustar nuevos vinos o nuevas propuestas de bodegas que quieran dirigir mejor su estrategia de ventas. Y es que los vinos que podemos encontrar son totalmente diferentes a los que encontramos en la zona, una ventaja para poder descubrir nuevas fronteras de sabores en la copa. Podríamos denominarlo como un autoservicio y calificarlo como la forma más cómoda de poder beberte una copa de vino sin esperar al camarero.
¿Cómo funciona? El espacio dispone de un dispenser que, con una tarjeta especial del local, podrás servirte de hasta 16 vinos distintos, aunque si quieres uno en particular, también puedes recurrir a la manera tradicional.
Esta selección de caldos internacionales tiene que ir acompañado por la mejor
gastronomía y este restaurante argentino sabe cómo hacerlo, puesto que le suman
una carta que viste para la ocasión: provoleta, empanadas y su famoso paquito.
Recetas típicas argentinas, pero sin dejar de lado ese guiño español. Los propietarios de Chulengo cuentan con una gran experiencia en gastronomía, pues sus comienzos fueron con una carnicería especializada en cortes de carne argentinos, que ahora puedes degustar en este nuevo ‘place to be’.
De la carta, la carne es la estrella indiscutible. Para que la esencia argentina se deguste en cada uno de los bocados y esa carne te transporte a Buenos Aires. Aunque Chulengo no se limita solo a la carne; su carta también incluye una variedad de platos como la mortadela italiana o salmón ahumado en casa, un plato exquisito y que se adapta a los gustos de los amantes del pescado.
El espacio se encuentra decorado con un cuidado impecable, tanto en el interior como en el exterior, creando un ambiente distendido y perfecto para disfrutar de una cena en pareja o con amigos.